En el anillo interno de Circunvalación, entre Catamarca y Mendoza, Capital, un siniestro vial dejó al descubierto la peligrosa combinación de una mala maniobra y el consumo de alcohol por parte de una joven conductora de 27 años. El incidente, que involucró únicamente a un automóvil Ford Focus, revela los riesgos asociados con la conducción bajo la influencia.
La conductora, cuya identidad se mantiene bajo reserva, admitió haber impactado contra el guardarrail debido a una maniobra errónea. A pesar de los golpes leves sufridos en el percance, la joven afirmó que no requería traslado hospitalario, descartando así la necesidad de la intervención de los servicios de emergencia (EM-107).
Sin embargo, la situación tomó un giro preocupante cuando se le realizó a la conductora el Test de alcoholemia, arrojando un sorprendente resultado de 1,81 gramos por litro (g/l) de alcohol en sangre, muy por encima de los límites permitidos. Ante esta situación, las autoridades procedieron a retener tanto el vehículo como a la conductora, trasladándola a la sede policial para llevar a cabo los procedimientos correspondientes.
El episodio destaca la importancia de la responsabilidad al volante y las consecuencias potencialmente graves de conducir bajo los efectos del alcohol. Las autoridades instan a la comunidad a tomar conciencia de los riesgos asociados con el consumo de alcohol al conducir, recordando que la seguridad vial es responsabilidad de todos.
La joven conductora enfrentará las consecuencias legales de sus acciones, mientras que este incidente sirve como un recordatorio contundente de los peligros que pueden surgir cuando la mezcla de alcohol y conducción se convierte en una temeraria realidad en nuestras calles.
Los comentarios están cerrados.