Un empresario ligado al sanjuanino Chiqui Tapia bajo la lupa por presunto lavado de dinero

Maximiliano Vallejo, titular de Sur Finanzas —firma que llegó a patrocinar a la Selección Argentina y a varios clubes—, es investigado por maniobras sospechosas que habrían movido más de $6.000 millones. Su cercanía con el sanjuanino Claudio “Chiqui” Tapia vuelve a poner en foco el entramado económico del fútbol argentino.

“Somos la billetera del fútbol”, suele repetir. Con esa frase y un crecimiento vertiginoso, Maximiliano Ariel Vallejo, de 40 años, pasó en pocos años de manejar una pequeña financiera del sur bonaerense a convertirse en sponsor principal de la Liga Profesional, de la Selección Argentina y de varios clubes, entre ellos Racing, Barracas Central y Banfield. Pero ahora, el empresario más mimado del círculo del presidente de la AFA, el sanjuanino Claudio “Chiqui” Tapia, enfrenta una investigación judicial por presunto lavado de dinero y operaciones financieras irregulares.

La causa, impulsada por la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (Procelac), apunta a una maniobra que habría movilizado más de $6.000 millones a través de la empresa Construcciones TAR, creada en 2022 y vinculada —según los registros— a personas sin capacidad económica para justificar semejantes movimientos. Los fondos se habrían distribuido luego entre casas de cambio, clubes de fútbol, empresas agrícolas, droguerías y agencias marítimas, sin documentación respaldatoria.

Una de las sedes de Sur Finanzas, la financiera que domina la zona Sur del Gran Buenos Aires.

 

En ese esquema aparece Centro de Inversiones Concordia, una casa de cambio en la que Vallejo figura como accionista, junto a familiares. La firma habría recibido transferencias millonarias desde la constructora investigada, lo que llamó la atención de los organismos de control financiero.

“Se está colectando toda la información bancaria para poder delimitar las operaciones”, confirmaron fuentes judiciales del fuero Penal Económico.

Un ascenso impulsado desde el fútbol

Vallejo fundó Sur Finanzas, una empresa dedicada a préstamos, cambio de divisas y servicios digitales. En pocos años abrió más de 20 sucursales y se expandió a nivel nacional. En 2024, su marca dio el gran salto: se convirtió en sponsor principal de la Selección Argentina y de la Liga Profesional, con el aval directo de Tapia.

Desde entonces, el empresario sanjuanino y el joven financista fueron inseparables en actos, viajes y partidos. En redes, Vallejo suele elogiar a Tapia con frases como: “Admiración total por tu gestión en la AFA, Chiqui. ¡Por muchos más!”.

El vínculo con el fútbol se fortaleció con contratos millonarios. Sur Finanzas estampó su logo en camisetas de Racing, Banfield, Platense, Temperley, Los Andes y Barracas Central —el club del propio Tapia—. En Racing, llegó a firmar un contrato por un millón de dólares, aunque las relaciones se habrían enfriado por demoras en los pagos.

Sospechas, política y futuro incierto

Mientras la Justicia analiza sus movimientos financieros, Vallejo busca mantener su bajo perfil mediático. Cercanos a su entorno aseguran que “no conoce la denuncia en su contra”. Sin embargo, la Unidad de Información Financiera (UIF) y la Procelac lo mencionan en sus reportes por presuntas transferencias incompatibles con la actividad declarada.

A pesar de la investigación, Vallejo sigue apareciendo en eventos oficiales junto a Tapia y figuras del deporte. En junio publicó una foto con Lionel Messi y escribió: “Se vienen cositas…”, en alusión a nuevos negocios con la AFA.

En el mundo del fútbol, nadie duda de su vínculo directo con el dirigente sanjuanino. “Nada se mueve sin el visto bueno de Chiqui”, confió un dirigente de la Liga Profesional.

Por ahora, la Justicia avanza en el rastreo del dinero, mientras el círculo más cercano de Tapia vuelve a quedar bajo la lupa. La historia del empresario que quiso ser “la billetera del fútbol argentino” podría transformarse en un nuevo capítulo del delicado cruce entre negocios, poder y pelota.

LA NACIÓN

Los comentarios están cerrados.