La conciliación obligatoria impuesta por el Gobierno provincial logró suspender temporalmente el paro de 48 horas que los gremios docentes de San Juan habían convocado, pero no logró calmar los ánimos de los sindicatos. Este jueves, pasadas las 9:30, representantes de los sindicatos UDAP, UDA y AMET se presentaron en la Subsecretaría de Trabajo de San Juan para iniciar una nueva instancia de diálogo con el Ejecutivo provincial.
La medida, que se buscaba como un mecanismo para dar fin al conflicto y evitar nuevas interrupciones en el ciclo lectivo, no solo suspendió el paro, sino que también tiene como objetivo frenar la escalada de medidas de fuerza en medio de la disputa salarial. A pesar de este intento de acercar posiciones, la relación entre los gremios y el Gobierno continúa tensa, con los sindicatos acusando al Ejecutivo de utilizar la Subsecretaría de Trabajo como una herramienta para frenar sus reclamos.
El conflicto comenzó a escalar cuando el Gobierno provincial decidió liquidar los sueldos de los docentes correspondientes a los meses de febrero y marzo con una segunda propuesta salarial que fue rechazada por los maestros. Esta postura oficial derivó en un paro de 48 horas convocado por los sindicatos, que ya había comenzado a generar malestar en las aulas y en la comunidad educativa.
En respuesta, el Gobierno de San Juan advirtió que descontaría el día a los docentes que adhirieran a la huelga del 5 de marzo, lo que agudizó aún más el conflicto. Los gremios, que reclaman una mejora salarial, acusaron a la administración provincial de no reconocer la gravedad de la situación económica que afecta a los trabajadores de la educación.
Aunque la conciliación obligatoria ha suspendido la medida de fuerza, el conflicto sigue siendo un tema de debate intenso. Los gremios no han mostrado señales de calmar su postura, mientras que el Gobierno insiste en que la solución pasa por negociar dentro de los marcos legales establecidos.
La conciliación se extenderá hasta el jueves a las 20, cuando ambas partes se volverán a encontrar para intentar llegar a un acuerdo. Sin embargo, la incertidumbre sobre el futuro de la situación educativa de San Juan sigue siendo alta. Si no se llega a una solución, no se descarta la reanudación de nuevas medidas de fuerza que podrían interrumpir nuevamente las clases.
Este conflicto, que pone en juego el futuro inmediato de miles de estudiantes, se perfila como uno de los más complejos en lo que va del año en la provincia. Las próximas horas serán clave para determinar si se logra una salida negociada o si el enfrentamiento entre los sindicatos y el Gobierno continuará escalando.
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