Teatro Sarmiento: el ícono cultural sanjuanino que renació con fuerza y diversidad

El Teatro Sarmiento es mucho más que un edificio cultural: es parte de la memoria colectiva y el presente activo de miles de sanjuaninos. Desde su origen como salón de actos de la Escuela Superior Sarmiento hasta convertirse en teatro oficial en 1981, este espacio ha sido testigo y protagonista del crecimiento artístico de la provincia.

Durante el último año, se realizaron más de 200 actividades culturales, incluyendo funciones teatrales, espectáculos de danza, conciertos y propuestas infantiles. Por sus tablas pasaron artistas locales y nacionales, como Axel y Cecilia Roth, además de numerosas compañías sanjuaninas.

Esta actividad intensa coincidió con un proceso de restauración integral llevado adelante por el Gobierno de San Juan, en el marco de un plan de fortalecimiento de infraestructura cultural. En solo 90 días, el Ministerio de Turismo, Cultura y Deporte, junto con el Ministerio de Infraestructura, Agua y Energía, transformaron el edificio: se renovaron la fachada, el foyer, los accesos, las butacas, la iluminación, el sonido, los camarines y la climatización. También se incorporó tecnología escénica de última generación y se mejoró la accesibilidad.

Uno de los momentos más emotivos fue la reinauguración del teatro, encabezada desde lo artístico por Nicolás Rodríguez, actual director del espacio. “La primera vez que entré a un teatro fue en nivel inicial, cuando nos llevaron a ver una obra sobre educación nutricional. Era el Teatro Sarmiento. Desde entonces supe que este lugar tenía algo especial”, recordó.

Rodríguez, que también estuvo a cargo de la curaduría artística del acto de reapertura, destacó la variedad de expresiones que se pusieron en escena: malambo, danza española, teatro, música. “Fue un homenaje al alma del teatro. Ser parte de esta nueva etapa me llena de orgullo”, expresó.

Con un fuerte compromiso con la diversidad de públicos y propuestas, el Teatro Sarmiento no solo ofrece un espacio para el arte, sino también empleo y formación para técnicos, artistas y emprendedores culturales. Su programación variada y su apertura a distintos lenguajes lo consolidan como uno de los pilares del ecosistema cultural de San Juan.

Hoy, el Sarmiento no solo mira hacia el pasado con orgullo, sino que proyecta un futuro activo y transformador, reafirmando su lugar como símbolo vivo de la cultura sanjuanina.

Op: Juan Llarena