“Son unos delincuentes”: el padre de Lucía Rubiño estalló tras el sobreseimiento de Echegaray

Este martes, el tribunal de garantías, encabezado por el juez Javier Figuerola, resolvió sobreseer a Juan Pablo Echegaray en la causa que investigaba su responsabilidad en el siniestro vial que terminó con la vida de Lucía Rubiño, ocurrido en octubre de 2023. La noticia generó una fuerte reacción en la familia Rubiño, que desde el inicio del caso ha luchado por obtener justicia.

Jorge Rubiño, padre de la joven fallecida, estuvo presente en la sala durante la lectura del fallo, con la esperanza de que la justicia le diera un giro favorable al caso. Sin embargo, tras escuchar la decisión judicial, su reacción fue de profunda indignación y frustración. En un emotivo testimonio ante los medios, expresó con voz quebrada: “Son unos delincuentes”. Con estas palabras, Jorge dejó claro su rechazo a lo que consideró una injusticia, y dejó en claro que no se quedarán de brazos cruzados: “Por supuesto que lo vamos a apelar”, dijo con determinación.

El padre de Lucía también aprovechó para agradecer el apoyo de la comunidad. “Gracias en nombre de mi criatura”, expresó entre lágrimas, reconociendo el esfuerzo y la solidaridad de los amigos, familiares y vecinos que, desde el inicio de la causa, han estado acompañando a la familia en su búsqueda de justicia. “Nos ayudó a seguir, a no dejarnos vencer. Ver tantas caras de amigos, eso nos da fuerzas”, añadió, visiblemente emocionado.

El fallo judicial fue basado en la solicitud de la Fiscalía, que pidió el sobreseimiento de Echegaray al considerar que no existían pruebas suficientes para sostener una acusación por homicidio culposo. Sin embargo, la querella, que representa a la familia Rubiño, se opuso a esta decisión, argumentando que sí existían elementos que demostraban la responsabilidad del imputado en el siniestro.

Mientras tanto, la lucha de la familia Rubiño no termina aquí. La decisión de apelar el fallo muestra su firme determinación de seguir buscando justicia para Lucía, a pesar de las adversidades. La madre de Lucía, Belén Montilla, también se mostró visiblemente afectada y destacó el desgaste emocional que enfrenta la familia tras más de tres años de incertidumbre.

A medida que el caso avanza, la familia Rubiño continúa con su reclamo, convencidos de que aún queda un largo camino por recorrer. “Nos quitan vida, la que nos dejaron ya nos la quitaron”, había expresado Belén en declaraciones previas, subrayando el sufrimiento y la espera de respuestas que enfrentan.

El caso sigue siendo un reflejo de las tensiones y desafíos que enfrenta la justicia en situaciones de alto impacto emocional, donde las decisiones legales tienen repercusiones profundas para las víctimas y sus familias.