Más de 10.000 hectáreas fueron alcanzadas por el fuego que se acerca a la zona urbana del norte de Atenas. Alrededor de 700 bomberos trabajan en el lugar.
Alrededor de 700 bomberos griegos combaten un masivo incendio cerca de Atenas. En el tercer día del operativo, se esperan la llegada de cientos de refuerzos de otros países europeos para contener las llamas que comenzaron el domingo en el municipio de Varnavas, unos 35 kilómetros al noreste de la capital griega.
El panorama no es optimista frente al pronóstico del Observatorio Nacional, un histórico instituto de investigación de Atenas, que anunció temperaturas de hasta 38° en la capital griega este martes y vientos de hasta 39 kilómetros por hora.
El cuerpo de bomberos cuenta con 200 camiones y nueve aeronaves que se despliegan en el lugar para combatir el peor incendio declarado en Grecia este año que calcinó hogares, negocios y coches en la periferia de la capital griega y forzó a la evacuación de miles de personas.
Impulsado por vientos huracanados, el incendio forestal había formado un frente de 30 kilómetros, con llamas que en algunos puntos superaban los 25 metros de altura. El ministro de Crisis Climática y Protección Civil de Grecia dijo que los bomberos estaban luchando en «condiciones dramáticas» frente a una grave sequía que afecta al territorio,
A pesar del despliegue «sobrehumano» de cientos de bomberos, las llamas ascendieron el lunes hacia el sureste por el monte Pentélico que domina la ciudad y avanzaron por suburbios de la capital donde viven decenas de miles de personas.
En este alarmante contexto, las autoridades emitieron decenas de órdenes de evacuación. En total, más de 50.000 personas se fueron de la ciudad y más de 10.000 hectáreas quedaron destruidas bajo los efectos del fuego.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, anunció que cuatro países de la Unión Europea enviarán material y bomberos a Grecia para ayudar a la extinción del incendio forestal. El país espera la ayuda de Italia, Francia, República Checa y Rumanía para poder combatir el incendio que continúa siendo una amenaza debido a la acción de los vientos.
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