Polémica por la Importación de Vino: Bodegueros vs. Viñateros

La llegada de vinos extranjeros, en su mayoría chilenos, ha generado opiniones encontradas entre bodegueros y viñateros, con posturas que van desde la aceptación de las nuevas reglas del mercado hasta la preocupación por un posible impacto negativo en la industria local.

Detalles de la Importación

Según el último informe del Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), desde enero hasta mayo ingresaron 4.388.500 litros de vino a granel, de los cuales 4.285.500 litros eran tintos. El 98% de esta cantidad provino de Chile, con un total de 4.300.700 litros de vino tinto no varietal a granel. En comparación, esta cifra representa un incremento del 381% respecto a los 809.000 litros importados en 2023, siendo la mayor cantidad de vino importado en los últimos siete años.

Reacciones en el Sector

El presidente de la Mesa Vitícola, Pablo Martín, manifestó que la importación se enmarca en las nuevas políticas nacionales y que el impacto en los productores locales será menor si se logra una macroeconomía más ordenada. Martín destacó que el volumen importado no es preocupante si se compara con las exportaciones, que alcanzan entre 17 y 20 millones de litros al mes. Además, argumentó que la importación se debió a la falta de calidad requerida en la producción local.

Por otro lado, Gustavo Samper, presidente de la Cámara de Bodegueros, expresó su preocupación por el impacto en las bodegas más pequeñas. Según Samper, la importación de vino ha «planchado» el mercado, ya que las grandes bodegas no están comprando a productores locales, lo que obliga a algunas pymes a ofrecer descuentos o vender a precios más bajos debido a la falta de demanda.

Impacto en el Mercado

Samper también señaló que mantener un equilibrio de stock es crucial para la estabilidad de la cadena vitivinícola. Actualmente, solo en San Juan hay más de 75.800.000 litros de vino tinto en existencia, lo que hace innecesario, a su juicio, importar más producto. Esto podría provocar una depresión en los precios del vino y, eventualmente, afectar el valor de la uva en la próxima cosecha.

Expectativas Futuras

Mientras algunos actores como Martín ven la situación como parte de un ajuste a las nuevas dinámicas del mercado, otros, como Samper, temen que esta tendencia de importación afecte negativamente al sector, especialmente a los pequeños productores y bodegas, en un contexto donde la competencia externa parece estar forzando a la baja los precios locales.

 

 

Op: Juan Llarena