En la jornada de este 3 de diciembre, el gobernador Marcelo Orrego encabezó el acto de entrega de un nuevo barrio. En esta oportunidad fue el Puente Rufino, que se encuentra en Santa Lucía. Así, 32 familias ya son adjudicatarias de sus viviendas.
Del acto también participaron el intendente de Santa Lucía, Juan José Orrego, ministros de Infraestructura, Agua y Energía, Fernando Perea; Educación, Silvia Fuentes; diputados Rosana Luque y Daniel Ripoll; directora del IPV, Elina Peralta, demás autoridades de esta repartición, funcionarios provinciales, departamentales y familias beneficiadas.
Al respecto, el gobernador dijo que “estoy emocionado de estar aquí entregando estas viviendas, un logro que refleja el esfuerzo de los sanjuaninos en tiempos difíciles. Aunque enfrentamos una de las crisis más profundas en la historia argentina, hemos demostrado que, con trabajo y organización, podemos seguir adelante. No cuento con los recursos que otras administraciones tuvieron, como obras públicas nacionales o subsidios clave, pero gracias al esfuerzo colectivo, seguimos avanzando”.
Agregó que “San Juan se destaca por ser la primera provincia en reactivar la obra pública, lanzar líneas de crédito para PyMEs y realizar grandes obras, sin importar colores políticos. Estas casas representan más que un lugar para vivir: serán el escenario de momentos inolvidables para las familias. Nos hemos levantado de grandes adversidades, como el terremoto del ’44, y lo seguiremos haciendo con la misma tenacidad y resiliencia. San Juan lo puede todo, incluso en tiempos difíciles, porque estamos comprometidos con mejorar la calidad de vida de nuestra gente”.
Cómo es el Barrio Puente Rufino
El complejo habitacional, ubicado en las calles Balcarce entre Pellegrini y Libertador, fue construido por SUYAI SRL a través del IPV. Las viviendas cuentan con dos dormitorios, baño, cocina-comedor, lavadero interior y exterior. Se realizan con sistema constructivo tradicional, incluyendo muros de ladrillo, estructura de hormigón armado y terminaciones de calidad, como pisos cerámicos, ventanas de aluminio y puertas de madera pintadas.
Cada vivienda se entrega con artefactos sanitarios, cocina con horno, mesada de granito, termotanque eléctrico y solar, y mosquitos en ventanas. Además, están provistos de instalaciones eléctricas, gas natural, agua potable y tanque de reserva. Las unidades adaptadas incluyen equipamiento adecuado para personas con discapacidad.
El barrio cuenta con calles enripiadas, cordones cuneta, veredas, arbolado público con riego individual, iluminación LED y espacios verdes con bancos y señalización. Incluye redes de agua potable, cloacas, gas y alumbrado público eficiente.
Op: Juan Llarena
Los comentarios están cerrados.