La reconfiguración interna en la Fiscalía General continúa sumando capítulos. Tras la sorpresiva salida de los cuatro supervisores de las Unidades Fiscales de Investigación, este miércoles se oficializó la nómina que acompañará a Guillermo Baigorrí en su conducción del Ministerio Público. Entre los confirmados aparece Héctor Fabián Melo, exfuncionario de la Corte de Justicia y actual miembro de una Cámara Penal, quien se convierte en una de las incorporaciones más resonantes del nuevo esquema.
Junto a Melo también fue ratificado Jorge Albarracín, otro exintegrante del máximo tribunal provincial, lo que marca una clara apuesta del fiscal General por figuras con conocimiento profundo del funcionamiento judicial.
A estos dos nombres se suman perfiles provenientes de áreas técnicas y jurisdicciones diversas:
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Julieta Mercado, secretaria de Cámara Laboral.
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Sandra Gutiérrez, con experiencia en Niñez y Adolescencia.
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Rodrigo Zabaleta, integrante del equipo de Asistencia Jurídica del Colegio de Jueces del fuero Penal.
La elección de Baigorrí no sorprende: días atrás, en una entrevista radial, había adelantado que su intención era conformar un equipo pequeño, integrado por personas “de plena confianza” y con quienes ya había compartido trabajo previo. “Son profesionales con capacidad y criterio, gente que conozco y respeto”, expresó al presentar formalmente a su mesa de colaboradores.
Un cambio estructural
La confirmación del equipo llega inmediatamente después de uno de los movimientos más significativos en lo que va de su gestión: el reemplazo de los cuatro supervisores de las UFI, todos designados durante la gestión de Edgardo Quattropani.
Los desplazados fueron:
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Rolando Lozano, referente de Cavig y Delitos contra la Propiedad.
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Fernando Rahmé, responsable de Anivi, Delitos Especiales, Informáticos y Estafas.
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Andrés Noguera, jefe de Flagrancia y Genérica.
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Federico Osollo, titular de Abordaje Territorial y Soluciones Alternativas.
Pese a la decisión, Baigorrí evitó tensiones públicas y destacó la labor de los funcionarios salientes. “Son personas valiosas y con trayectoria. Siguen contando conmigo”, sostuvo.
Con la mesa chica definida, el nuevo fiscal General comienza a delinear una gestión que busca reorganizar áreas clave y establecer un funcionamiento más compacto, con colaboradores que considera estratégicos en la etapa que inicia.
POR LIC. EUGENIA VILA
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