Médicos terapistas de San Juan reactivan su asociación para enfrentar la crisis de la especialidad

Tras años sin conducción, un grupo de profesionales retomó el control de la entidad que los nuclea. Apuntan a mejorar condiciones laborales, sumar vocaciones a la terapia intensiva y abrir el diálogo con el Estado.

Después de varios años de inactividad y una presidencia acéfala desde 2023, los médicos terapistas de San Juan decidieron reactivar su asociación con el objetivo de defender la especialidad y hacer frente a los problemas estructurales que hoy los afectan: la falta de profesionales, los bajos honorarios y las condiciones laborales complejas.

Durante la pandemia de COVID-19, la labor de los terapistas cobró visibilidad por su rol central en la atención de pacientes críticos. Sin embargo, pasada la emergencia, muchas de las demandas del sector quedaron sin respuesta, y la asociación que los representaba fue quedando al margen. La última presidenta fue la doctora Patricia Díaz, quien dejó su cargo el año pasado, y desde entonces no hubo renovación de autoridades.

Ahora, el doctor Ernesto Vera y un grupo de colegas comenzaron el proceso de reorganización para volver a poner en funcionamiento la Asociación de Médicos Terapistas. El objetivo no es solo institucional: buscan instalar en la agenda la urgente necesidad de fortalecer esta especialidad médica clave.

Según explicó Vera, una de las mayores preocupaciones es que cada vez menos médicos optan por formarse como terapistas, en parte por los bajos ingresos que ofrece la especialidad y por el alto nivel de exigencia que implica. “Muchos colegas formados en terapia intensiva hoy se dedican a otras especialidades más rentables, dejando vacantes en las unidades de cuidados críticos”, advirtió.

Frente a este panorama, la asociación aspira a tener una participación activa en el diálogo con autoridades sanitarias. Uno de los ejes será trabajar con el Ministerio de Salud para lograr la actualización de los valores que paga la Obra Social Provincia por las prestaciones, así como impulsar la creación y fortalecimiento de unidades de terapia intensiva en departamentos alejados del Gran San Juan.

“El objetivo académico y científico sigue siendo central para la asociación, pero también creemos que debemos participar en los reclamos económicos, desde un lugar de diálogo y no de confrontación”, sostuvo Vera.

En este proceso de reactivación, los médicos están ordenando la documentación legal para poder convocar a una asamblea y elegir nuevas autoridades. Aunque actualmente Vera lidera la organización, su intención es dejar la presidencia una vez que se conforme una comisión directiva representativa de todos los sectores: público, privado y residentes.

El objetivo de fondo es claro: asegurar que San Juan cuente en el futuro con terapistas formados, motivados y bien remunerados. Porque, como aseguran desde la Asociación, estos médicos son una pieza vital para el funcionamiento de cualquier sistema de salud.

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