Varios diarios franceses demandaron a la red social X, del multimillonario Elon Musk, acusándola de utilizar sus contenidos sin remunerarlos, lo cual violaría el principio de «derechos afines», que permite a periódicos, revistas o agencias de prensa recibir pagos por sus contenidos reproducidos en plataformas de internet.

Antes de esta acción, estos diarios habían citado a X y a su filial francesa a una comparecencia de urgencia, acusándola de negarse a negociar. El 24 de mayo, un juez falló a favor de los medios y ordenó a la red social que les entregara, en el plazo de dos meses, datos comerciales que les permitan evaluar los ingresos que la plataforma obtiene de sus contenidos.

En paralelo a esta cuestión, el diario británico The Guardian anunció que dejó de publicar contenido en la red social del multimillonario. Entre los motivos que motivaron a tomar la decisión, el medio destacó en una publicación que la plataforma promueve la difusión de «teorías de conspiración de extrema derecha y racismo».

«Los medios sociales pueden ser un importante instrumento para las organizaciones de noticias y ayudarnos a alcanzar nuevas audiencias pero, en este momento, X desempeña un papel socavado para promocionar nuestro trabajo», apuntó el medio.

El diario, que tiene casi 11 millones de seguidores en la plataforma, indicó que esta medida era algo que había estado considerando durante un tiempo y que pudo ser tomada gracias a que el modelo de negocios del medio «no depende de contenido viral adaptado a los caprichos de los algoritmos de los gigantes de las redes sociales». En cambio, aseguraron, se financian directamente de los aportes de los lectores.