La Adicción al Juego: Un Problema Creciente que No Es un Juego
El Día Internacional del Juego Responsable, celebrado cada 17 de febrero, pone de relieve la creciente preocupación por el vínculo patológico que algunas personas desarrollan con el juego.
Esta fecha, promovida por la Asociación Europea de Apuestas y Juegos de Azar, se celebra en todo el mundo, y San Juan no es ajeno a esta causa, intensificando las acciones de prevención y promoción de un juego saludable a través de la Caja de Acción Social.
Un Juego que Deja de Ser Recreativo
El concepto de “juego responsable” se refiere a la práctica del juego como una actividad recreativa, cuyo objetivo es el disfrute y no el lucro. Se busca que las personas jueguen con el entendimiento de que puede haber victorias y pérdidas, respetando siempre las reglas. El juego, en su forma más saludable, enseña a respetar las normas, pone a prueba las habilidades y permite superarse. Sin embargo, la proliferación de sitios ilegales de juegos de azar en línea ha hecho que la relación de muchas personas con el juego se vuelva patológica, especialmente entre los jóvenes.
El Programa Provincial de Juego Responsable
En respuesta a este fenómeno, la Caja de Acción Social, dependiente del Ministerio de Economía, Finanzas y Hacienda, implementa el Programa Provincial de Juego Responsable. Este programa tiene como objetivo brindar apoyo a quienes identifican que el juego ha dejado de ser una actividad recreativa y se ha convertido en un problema. A través de la iniciativa, se ofrece un formulario de Autoexclusión a las Salas de Casino, en el que las personas interesadas pueden autorreconocerse como jugadores problemáticos y, a su vez, recibir orientación para consultar con un profesional en salud mental.
Además, el programa brinda asesoramiento jurídico para aquellos casos que requieran una intervención judicial para proteger la salud y los bienes de la persona afectada.
Principios del Juego Responsable
Los expertos en salud mental recomiendan adherir a una serie de principios que permiten practicar el juego de manera responsable, tales como:
- Conocer los límites: Establecer y respetar límites de tiempo y dinero antes de jugar.
- Jugar por diversión: Considerar el juego como un entretenimiento, no como una vía para ganar dinero.
- No jugar bajo influencia: Evitar jugar cuando se está bajo el efecto de alcohol o drogas, ya que esto afecta el juicio.
- Atención a las señales de advertencia: Reconocer cuando el juego se convierte en un problema, como la necesidad de apostar más para obtener la misma satisfacción o la irritación al intentar detenerse.
- Buscar ayuda: Si el juego se vuelve un problema, buscar asesoramiento profesional es esencial.
Canales de Contacto y Apoyo
Para aquellos que detectan conductas patológicas relacionadas con el juego, la Caja de Acción Social ofrece herramientas y atención personalizada de profesionales en psicología. A través de diversos canales de contacto, como el chat bot de WhatsApp (2644553619) disponible las 24 horas o la línea gratuita 0800-999-1314, se brinda asistencia directa.
Además, el organismo ha establecido convenios con entidades públicas y privadas para el tratamiento de la ludopatía, tales como el Centro por la Vida del Ministerio de Salud de San Juan y la Fundación Linju especializada en ludopatía infanto-juvenil, entre otros.
Asistencia Localizada
Los ciudadanos pueden acceder a asistencia a través de unidades municipales especializadas, como las Unidades Municipales de Consumos Problemáticos (UMCOP), que brindan apoyo en los 19 departamentos de la provincia. Además, el Ministerio de Familia y Desarrollo Humano trabaja en conjunto con los municipios para brindar atención a personas con problemas de consumo y conductas problemáticas asociadas al juego.
El Día Internacional del Juego Responsable no solo es una fecha de reflexión, sino una oportunidad para fortalecer las estrategias de prevención y tratamiento en torno a un problema que afecta a cada vez más personas, especialmente a las más jóvenes. La adicción al juego es una realidad compleja que requiere conciencia, apoyo profesional y, sobre todo, un enfoque de prevención para evitar que este “juego” termine controlando la vida de quienes lo padecen.
Op: Juan Llarena
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