Julian Assange llegó a un acuerdo con el gobierno de Biden y quedará en libertad por primera vez desde 2019

El Mundo

El fundador de WikiLeaks, Julian Assange, se declarará culpable de un delito en un acuerdo con el Departamento de Justicia de Estados Unidos, tras llegar a un acuerdo con el gobierno de Joe Biden, lo que le permitirá salir de la cárcel y poner fin a una prolongada saga legal que abarcó varios continentes y se centró en la publicación de numerosos documentos clasificados, según documentos judiciales presentados el lunes por la noche.

«Julian Assange está libre. Abandonó la prisión de máxima seguridad de Belmarsh la mañana del 24 de junio, tras haber pasado allí 1.901 días. El Tribunal Superior de Londres le concedió la libertad bajo fianza y fue liberado en el aeropuerto de Stansted por la tarde, donde abordó un avión y partió del Reino Unido«, anunció WikiLeaksÂen un comunicado publicado en su cuenta de la red social X.

Está previsto que Assange comparezca ante el tribunal federal de las Islas Marianas, una mancomunidad estadounidense ubicada en el Pacífico occidental, para declararse culpable de un cargo bajo la Ley de Espionaje por «conspirar para obtener y difundir ilegalmente información clasificada de defensa nacional«, según informó el Departamento de Justicia en una carta presentada ante el tribunal.

La declaración de culpabilidad, que debe ser aprobada por un juez, pone fin abruptamente a un caso penal de intriga internacional. Los investigadores han afirmado repetidamente que sus acciones infringieron leyes diseñadas para «proteger información sensible y pusieron en peligro la seguridad nacional del país«, mientras que muchos defensores de la libertad de prensa argumentan que «actuaba como periodista para exponer irregularidades de distintos gobiernos«.

Se espera que Assange regrese a Australia tras su declaración de culpabilidad y la sentencia, prevista para el miércoles por la mañana, hora local, en Saipán, la mayor isla de las Marianas. La audiencia se llevará a cabo allí debido a la oposición de Assange a viajar al territorio continental de Estados Unidos y a la proximidad del tribunal a Australia.

El acuerdo asegura que Assange admitirá su culpabilidad, mientras que le exime de cualquier pena de prisión adicional. Ha pasado años escondido en la embajada de Ecuador en Londres después de que las autoridades suecas pidieran su detención por falsas acusaciones de violación, antes de ser encarcelado en el Reino Unido.

Entre los archivos publicados por WikiLeaks se encuentra un video de un ataque con helicópteros Apache perpetrado en 2007 por las fuerzas estadounidenses en Bagdad (Irak), en el que murieron 11 personas, entre ellas dos periodistas de la agencia Reuters.

La acusación del Departamento de Justicia, desvelada en 2019, acusaba a Assange de «alentar y ayudar» a la analista de inteligencia del Ejército estadounidense, Chelsea Manning, a robar «cables diplomáticos y archivos militares» que WikiLeaks publicó en 2010. Los fiscales habían afirmado que Assange «dañó la seguridad nacional al publicar documentos que perjudicaban a Estados Unidos y sus aliados, y ayudaban a sus adversarios«.

El caso fue criticado por defensores de la prensa y partidarios de Assange. Los fiscales federales argumentaron que su conducta iba mucho más allá de la de un periodista que recopila información, equiparándola a un intento de «solicitar, robar y publicar indiscriminadamente documentos clasificados del gobierno«. Esto se llevó a cabo a pesar de que el Departamento de Justicia de la administración Obama había decidido no procesarlo años antes.

El acuerdo de culpabilidad se produce meses después de que el presidente Joe Biden dijera que estaba considerando una petición de Australia para que Estados Unidos renunciara a procesar a Assange.

Manning fue condenada a 35 años de prisión tras ser declarada culpabla de violar la Ley de Espionaje y otros delitos por filtrar documentos clasificados del gobierno y militares a WikiLeaks. El presidente Barack ObamaÂconmutó su sentencia en 2017, permitiendo su liberación tras aproximadamente siete años entre rejas.

Assange volvió a los titulares en 2016 después de que su sitio web publicara correos electrónicos demócratas que, según los fiscales, fueron robados por agentes de inteligencia rusos. Aunque nunca fue acusado en la investigación sobre Rusia del abogado especial Robert Mueller, esta investigación detalló el papel que desempeñó la operación de pirateo en la interferencia en las elecciones de ese año en favor del entonces candidato republicano Donald Trump.

Tras la publicación de los documentos en 2010, funcionarios del Departamento de Justicia consideraron la posibilidad de presentar cargos contra Assange, pero dudaron de que el caso se mantuviera en los tribunales y les preocupaba que pudiera ser difícil justificar su procesamiento por actos similares a los de un periodista convencional. Sin embargo, la postura cambió durante la administración Trump, y en 2017 el exfiscal general Jeff Sessions consideró prioritaria la detención de Assange.

La familia y los partidarios de Assange han señalado que su salud física y mental se ha deteriorado tras más de una década de batallas legales, incluyendo siete años pasados dentro de la Embajada de Ecuador en Londres.

Assange se refugió en la Embajada de Ecuador en Londres en 2012 y se le concedió asilo político después de que los tribunales de Inglaterra dictaminaran que debía ser extraditado a Suecia en el marco de una falsa investigación por violación en el país escandinavo. Fue detenido por la policía británica después de que el gobierno de Ecuador le retirara el estatus de asilado en 2019 y luego encarcelado por saltarse la fianza cuando se refugió por primera vez dentro de la embajada.

Aunque Suecia terminó retirando la investigación por delitos sexuales, Assange ha permanecido en la prisión londinense de alta seguridad de Belmarsh durante la batalla por la extradición con Estados Unidos.

Por: Rodo Galdeano
Fuente: Derecha Diario

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