En un contexto de mayor estabilidad económica y un clima de negocios más optimista, casi el 50% de las empresas alemanas en el país prevén invertir en 2025 y se espera la llegada de nuevas firmas en distintos sectores, además de un aumento del comercio bilateral con la potencia europea.

Alemania es el 13vo directo en Argentina, con el 2,7% del total de inversiones extranjeras. Estas incluyen a la industria automotriz, la minería, la industria química y la fabricación de maquinaria. A su vez, hay oportunidades en la cooperación argentino-alemana para promover el desarrollo de minerales críticos, la economía del conocimiento, infraestructura estratégica, entre otros.

En términos comerciales, es el cuarto socio más relevante de la Unión Europea, detrás de Países Bajos, España e Italia. En el promedio de los últimos cinco años, las exportaciones argentinas a Alemania representaron cerca del 10% de las ventas al bloque, precisó un informe de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).

Se destacan los complejos de carne y cueros bovinos, plata, automotriz y soja. Las importaciones desde el país germano (quinto proveedor) abarcan maquinaria, vehículos automotores, autopartes y productos químicos y farmacéuticos.

“Estamos recibiendo muchas consultas de empresas interesadas en el país que buscan partners argentinos para vender productos alemanes o comprar insumos nacionales”, dijeron a Infobae desde la Cámara de Industria y Comercio Argentino-Alemana (AHK).

En 2024 las exportaciones alcanzaron los USD 814 millones, mientras que las importaciones, USD 2.656 millones. De esta manera, la balanza comercial arroja un saldo negativo de USD 1.841 millones, en línea con el rojo de la última década y la tendencia descendente en el comercio. Por ello, el hecho que las transformaciones en el entorno macroeconómico llamen la atención en Berlín resulta importante para renovar la relación bilateral.

En tanto, AHK señaló a este medio que “los sectores que despiertan interés son en general agro/alimentos, médico/dental, químico/cosmético, industrial/metalmecánico. También vemos algunas consultas sobre sector inmobiliario”.

Entre las compañías que ya están en el país, tales como Volkswagen, Bayer, Henkel y Siemens; crecieron las expectativas de inyección de capital para 2025: un 47% planea incrementar sus inversiones, sosteniendo la tendencia al alza de los últimos años. No es menor que el 53% de estas requerirán mano de obra adicional.

Sin embargo, “el horizonte de repago continúa siendo mayormente de corto plazo: el 63% de las empresas espera recuperar sus inversiones rápidamente, lo que refleja que el riesgo financiero sigue siendo percibido como elevado”, indica la encuesta de AHK junto a EY.

Al mismo tiempo, las organizaciones destacaron la necesidad de una mejora de las terminales logísticas (19%), seguidas por la infraestructura energética —tanto en generación (13%) como en distribución eléctrica (13%). Se subraya también la importancia de la red ferroviaria (12%) y la fluvial (10%) para mejorar la conectividad.

“Estos datos reflejan una demanda clara por infraestructura que facilite la circulación de bienes y reduzca costos operativos, condiciones clave para sostener un ciclo de inversión privado más dinámico”, asegura el informe.

En el plano económico, las respuestas apuntan a una legislación laboral que estimule el empleo (14%), un sistema tributario y una política cambiaria más estables (13%), y un plan de desarrollo claro y sustentable (13%).

Por otra parte, el 56% de las empresas registró un aumento en sus ventas y un 51% reportó una mejora en su rentabilidad.

Las expectativas para 2025 son claramente optimistas. El 77% de los encuestados proyecta un crecimiento en sus ventas en términos reales: 5% espera un incremento superior al 20%, el 37% entre 10% y 20%, y otro 35% prevé una suba más moderada de hasta el 10%. Solo un 5% anticipa una leve caída, y ninguna una disminución significativa.

“Esta visión positiva se alinea con las previsiones macroeconómicas nacionales e internacionales. El Fondo Monetario Internacional (FMI), por ejemplo, estima un crecimiento del PBI argentino del 5,5% en 2025, impulsado por un repunte de la actividad económica tras el ajuste fiscal y monetario iniciado en 2024″, resalta el trabajo.

Sobre la rentabilidad, si bien las expectativas son algo más cautelosas que en ventas, también predominan las proyecciones favorables: el 62% de las empresas espera una mejora en sus márgenes, y un 31% cree que se mantendrán estables.

Aún sin definiciones respecto a la ratificación del acuerdo de libre comercio entre la UE y el Mercosur, el canciller alemán, Friedrich Merz, en su primera declaración de Gobierno ante la Cámara Baja, sostuvo: “Queremos apoyar a la UE para que cierre ahora mismo el mayor número posible de nuevos acuerdos comerciales, que sólo requieran la aprobación de las instituciones europeas”.

“Estamos a favor de una rápida ratificación del acuerdo con el Mercosur”, agregó.

Países como Francia se oponen férreamente al tratado y ejercen presiones para bloquearlo. “El proyecto de acuerdo entre la UE y Mercosur es inaceptable en el estado actual. El presidente se lo ha vuelto a decir a la presidenta de la Comisión Europea”, había informado el Palacio del Elíseo en un comunicado. “Seguiremos defendiendo sin descanso nuestra soberanía agrícola”.

La BCR consideró en un informe: “El avance del acuerdo Mercosur-UE puede representar una oportunidad para impulsar aún más el comercio de carnes entre Alemania y Argentina. Este incluye nuevos cupos de carne vacuna y una sustantiva baja de aranceles para el sector cárnico argentino. De concretarse el acuerdo, los aranceles de la carne vendida bajo cuota Hilton pasarían de 20% a 0%”.

Fuente: Infobae

Rivero. C