En un escenario de creciente tensión política en el Concejo Deliberante de Caucete, el reclamo de cuatro concejales de la oposición por un aumento salarial ha desencadenado una confrontación con la intendenta Romina Rosas, quien ha anunciado que vetará la solicitud de los ediles.
El origen del conflicto se remonta a la primera sesión ordinaria del Concejo, donde el concejal de Juntos por el Cambio, Emanuel Castro, respaldado por otros ediles opositores, planteó que sus salarios eran insuficientes y no cumplían con la normativa de la carta orgánica, que establece que deben percibir el 80% del salario de la intendenta Rosas.
El reclamo llevó a la presentación de una ordenanza para modificar el presupuesto y aumentar los salarios de los concejales y sus asesores. Sin embargo, el presidente del Concejo, José Luis Giménez, quien redactó el texto de la ordenanza, incluyó a Castro como autor de la moción, lo que generó un enfrentamiento entre ambos.
Castro exigió que su nombre fuera retirado de la ordenanza, amenazando con acciones legales, mientras que Giménez argumentó que el concejal no quería quedar en evidencia por su reclamo salarial en medio de la crisis económica que afecta a muchos cauceteros.
El conflicto escaló cuando se reveló que cualquier concejal podía solicitar a la Contaduría del municipio información sobre si sus salarios cumplían con lo establecido en la carta orgánica. Esto provocó un endurecimiento de posturas entre la oposición y la intendenta Rosas.
Ante este panorama, fuentes municipales han anunciado que Rosas vetará la ordenanza que busca el aumento salarial de los concejales. Esto representa un obstáculo para los ediles de la oposición, quienes buscan un incremento en sus ingresos en medio de la crisis económica.
En las próximas horas se espera una resolución definitiva sobre este asunto, mientras tanto, el enfrentamiento político en Caucete continúa en aumento.
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