El operario, identificado como Azcurra, se encontraba colocando una nueva caja de fusibles cuando, por causas que aún se investigan, dos fases eléctricas entraron en contacto, provocando una explosión y un fogonazo. El impacto le causó quemaduras en el rostro y afectó sus vías respiratorias, dejándolo tendido en la vereda, aunque inicialmente estaba consciente.
El trabajador fue trasladado de urgencia al Hospital Marcial Quiroga por el ingeniero responsable de la obra. Sin embargo, debido a la gravedad de su cuadro, fue derivado posteriormente al Hospital Privado, donde permanece internado en terapia intensiva, intubado y con pronóstico reservado.
Fuentes judiciales indicaron que Azcurra llevaba puestos los elementos de seguridad obligatorios, como guantes, botas y lentes protectores, al momento del accidente. Pese a ello, el incidente se produjo de forma repentina y con gran violencia.
La Unidad Fiscal, junto con efectivos de Policía Científica y Brigada de Investigaciones, trabaja en el lugar para recolectar pruebas y determinar qué provocó la explosión. Además, se analizan imágenes de cámaras de seguridad de la zona para reconstruir la secuencia de los hechos.
Por el momento, el área donde ocurrió el accidente permanece cerrada preventivamente mientras avanzan las pericias y la empresa revisa los protocolos de seguridad de la obra.
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