Francia: pese a la derrota electoral, la candidata de Macron fue reelegida como presidenta de la Asamblea Nacional

Si bien la izquierda se impuso en los comicios legislativos, quedó lejos de alcanzar la mayoría parlamentaria y con 220 votos, la Cámara baja reeligió a Yael Braun-Pivet.

Pese a la derrota de Emmanuel Macron en las últimas elecciones legislativas en Francia, que quedó en segundo lugar detrás de la izquierda, los diputados reeligieron a Yael Braun-Pivet, la candidata oficialista, para presidir la Asamblea Nacional.

Braun-Pivet fue reelegida con 220 votos, frente al candidato comunista André Chassaigne de la alianza de izquierda Nuevo Frente Popular (NFP), que tuvo 207 votos y al de la ultraderecha Sébastien Chenu, que quedó en tercera posición con 141 votos.

La votación se dio luego de largas negociaciones entre los partidos que conforman el Congreso, dividido en tres grandes bloques, y en medio de un contexto de tensión política, a una semana del comienzo de los Juegos Olímpicos de París.

De esta manera, queda configurado un nuevo panorama en la Asamblea Nacional y podrían crearse nuevas alianzas para alcanzar mayorías.

Controversia por la reelección de Yael Braun-Pivet

Tras la votación, Chassaigne cuestionó la elección de Braun-Pivety consideró que «el voto de los franceses y francesas»en las «fue robado» por una «alianza contra natura» entre el partido presidencial Renacimiento y la derecha.

Por su parte, el ultraderechista Chenu, del partido Agrupación Nacional (RN) liderado por Marine Le Pen, también criticó la decisión del Parlamento y señaló que la elección de Braun-Pivet «burló la voluntad del electorado» y fue una «victoria de las triquiñuelas».

Chenu también denunció una alianza «contra natura entre los macronistas y Los Republicanos», criticando que esta formación conservadora hizo campaña afirmando ser la oposición al presidente.

Elecciones legislativas: cambia la conformación parlamentaria en Francia

Las elecciones legislativos a dos vueltas del 30 de junio y del 7 de julio reconfiguraron la conformación del parlamento francés y una gran fragmentación, en la que el NFP – la alianza de izquierdas que incluye a socialistas, comunistas, ecologistas y la formación de izquierda radical de La Francia Insumisa (LFI) – quedó en primer lugar con 193 diputados, pero lejos de la mayoría absoluta de 289 escaños.

Por detrás quedó la alianza de centroderecha de Macron (164 escaños) y la extrema derecha obtuvo 143 diputados.

El cargo de presidente de la Asamblea Nacional consiste sobre todo en organizar y moderar los debates, pero como cuarta personalidad más importante del país cuenta con poderes constitucionales clave.

El NFP, pese a quedar en primer lugar en la segunda vuelta, no logró acordar un candidato de consenso para el cargo de primer ministro debido a las diferencias entre La Francia Insumisa, que es la principal fuerza, y los socialistas.

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