Las investigaciones de la Justicia estadounidense hallaron coincidencias entre las huellas dactilares halladas en la escena el asesinato del CEO de UnitedHealthcare, Brian Thompson, y las tomadas este miercoles a su presunto asesinoLuigi Mangione, imputado con asesinato en segundo grado en conexión al crimen luego de ser capturado el lunes en posesión de una mascara, una pistola con silenciador y una libreta donde exponía sus quejas contra la industria de los seguros y un plan de ataque «dirigido, preciso y que no pone en riesgo a los inocentes».

El sospechoso, de 26 años, fue hallado en un McDonald’s en AltoonaPensilvania, a más de 450 kilómetros de Manhattan, donde Thompson fue asesinado. Fue gracias a la denuncia de un trabajador del establecimiento, luego de una persecución de alto perfil de seis días después del asesinato. Además del manifiesto, el hombre cargaba con una pistola y silenciador impresos en 3D, «consistentes con las utilizadas en el asesinato», según la policía de Nueva York.

Thompson, de 50 años, fue asesinado a tiros antes de entrar al Hotel Hilton del centro neoyorquino, donde UnitedHealthcare sostendría una reunión con inversores, el pasado 5 de diciembre, en un ataque que quedó registrado en las cámaras de seguridad. Las imágenes muestran al sospechoso abandonando la escena en una bicicleta de camino al Central Park. Poco después, se subió a un taxi que le trasladó a una estación de autobuses de Port Authority, en pleno centro de Manhattan.

Un manifiesto de frustración

En su cuaderno, las autoridades encontraron anotaciones en las que el sospechoso relata que descartó su plan de poner una bomba en el hotel, para evitar matar inocentes. «¿Qué haces? Matas al CEO en la convención anual de parásitos tacaños», escribió Mangione en su libreta, en la cual también expresaba su relación de admiración-adversidad con «la América empresarial».

Según reportes del New York Post, la nota declara que es injusto que los Estados Unidos tuviera el sistema de salud más caro del mundo y que ello sirviera para el lucro de unas cuantas compañías, pero no se tradujera en el aumento de «nuestra esperanza de vida».

El jefe de Detectives del Departamento de Policía de Nueva York, Joseph Kenny, había adelantado que tuvo la oportunidad de leer el manifiesto encontrado, en un programa de televisión del martes . «Está escrito a mano. Da indicios de una frustración con el sistema de atención médica en Estados Unidos», declaró el policía, que no confirmó los informes de prensa que indicaban que las palabras «negar», «defender» y «deponer» estaban inscriptas en los casquillos de bala encontrados en la escena del crimen.

«Insulto a la inteligencia del pueblo»

Mangione fue visto gritando y forcejeando con los policías que lo custodiaban en la entrada al tribunal del condado de Blair, Pensilvania, donde debía sostener una audiencia respecto a su posible extradición al estado de Nueva York. Mientras entraba al tribunal, el presunto asesino vociferó que su detención y acusación son injusticias que representan «un insulto a la inteligencia del pueblo estadounidense».

Mangione se encuentra detenido sin derecho a fianza en Pensilvania, acusado de cargos menores como posesión sin licencia de un arma de fuegofalsificación de documentos y el uso de identificaciones falsas durante su captura. Las identificaciones eran similares a la utilizadas por el asesino antes del crimen, una de ellas incluso coincidiendo con la usada por el asesino para registrarse en un hostel de Manhattan antes del ataque.

El sospechoso tendrá que comparecer ante un tribunal el próximo 23 de diciembre, bajo sospecha de cargos por asesinato en segundo grado, dos cargos por posesión ilegal de armas y otros delitos en el estado de Nueva York.

«Miembros del Departamento de Policía de Altoona arrestaron a Luigi Mangione, un hombre de 26 años, por posesión de armas de fuego. En este momento, creemos que ésta es la persona que estamos buscando», dijo la jefa de la policía neoyorquina, Jessica Tisch, durante una conferencia de prensa junto al alcalde de la ciudad, Eric Adams.

De millonario a misántropo

Nacido y criado en Baltimore, la ciudad más poblada del estado de Maryland, el sospechoso proviene de una familia sumamente respetada. Como dueños de Lorien Health Systems, una red de enfermería especializada y centros de vida asistida, los Mangione incluso cuentan con su propia sala en el Greater Baltimore Medical Center, el mayor hospital de la ciudad, debido a sus generosas donaciones. Asi, Mangione logró graduarse como ingeniero en la prestigiosa Universidad de Pensilvania, y estaba viviendo en Hawai antes del asesinato.

A pesar de ser recordado como un joven sumamente capaz y de buena predisposición, líder de numerosas iniciativas al interior de su comunidad, el presunto asesino se había distanciado de su círculo en el último tiempo. Según contaron amigos de Mangione, el sospechoso vivía con un grave dolor de espalda y, luego de que un accidente de surf hubiera agravado su condición en 2023, se había sometido a una operación para tratar su afección.

Tras su intervención, su actitud había cambiado radicalmente, alejándose de su círculo y entrando en la clandestinidad, con su madre incluso emitiendo una orden de búsqueda de personas en 2023.

En los últimos años, Mangione había mostrado indicios de una conducta errática en su actividad en línea. «Cuando todas las formas de comunicación fallan, la violencia es necesaria para sobrevivir. Pueden no gustarte sus métodos, pero al ver las cosas desde su perspectiva: no es terrorismo, es guerra y revolución», compartió el sospechoso en su reseña del Manifesto del Unabomber, escrito por el asesino anonimo que aterrorizó los Estados Unidos entre 1970 y 1990 con una serie de cartas-bomba.

Quiero que me llames. No sé si estás bien o simplemente estás en un lugar muy aislado y no tienes conexión. Pero hace varios meses que no sé nada de vos«, le escribió un amigo en X en septiembre, en un mensaje que se encuentra eliminado. Miembros de su familia emitieron una declaración conjunta el lunes por la noche en la que se mostraron «conmocionados y devastados por el arresto de Luigi».

Violencia contra la «codicia corporativa»

Desde la captura de Mangione, el suceso ganó particular relevancia, y el presunto asesino se convirtió en una especie de ídolo de las redes sociales, símbolo de venganza por los abusos de las aseguradoras privadas de salud.

Este miércoles, las acciones de UnitedHealth Group, la aseguradora más grande de Estados Unidos, cayeron alrededor de un 5 % tras conocerse detalles del manifiesto que Mangione portaba durante su detención. Desde el asesinato de Thompson, hace una semana, las acciones de la compañía han sufrido una caída de aproximadamente un 10%, en medio de la inestabilidad por la muerte de su CEO y la ola de indignación relacionada al caso.

A pesar de ello, el beneficio neto del UnitedHealth Group continúa en aumento, pasando de 18.200 millones de dólares en 2021 a los 25.100 millones en la actualidad, un aumento del 38%, según reportó el diario económico Forbes

La Casa Blanca, a través de la secretaria de prensa Karine Jean-Pierre, calificó el crimen de Thompson como «horrible» y dijo que «la violencia para combatir cualquier tipo de codicia corporativa es inaceptable». Aunque no quiso entrar en detalles sobre el caso, la portavoz dijo que cualquier tipo de violencia sería condenada, independientemente de sus fines.