El consumo de panificados cayó un 30% en San Juan por la suba de insumos y la pérdida de poder adquisitivo
Desde la Cámara de Panaderos aseguran que el precio de la margarina aumentó un 80% en lo que va del año, pero advierten que no pueden trasladar el costo al público.
El consumo de productos panificados en San Juan sufrió una caída del 30% interanual, según datos aportados por la Cámara de Panaderos provincial. El principal motivo es la fuerte suba en el costo de los insumos básicos, como la margarina, que tuvo un incremento del 80% entre enero y julio de este año. A pesar del impacto en los costos de producción, el precio final de productos como las facturas no aumentó en la misma proporción, debido a la imposibilidad de trasladar los valores al público sin perder ventas.
José María Iglesias, referente del sector, explicó que el valor de la docena de facturas pasó de $6.000 en enero a $8.400 en julio, es decir, un 40% más. “La margarina es un insumo indispensable, sin ella no se puede hacer factura”, sostuvo, y aclaró que la escasez de este producto también empujó los precios al alza.
En contraste con lo que ocurre en Buenos Aires, donde algunos panaderos aseguran que deberían vender la docena de facturas a $25.000 para mantener la rentabilidad, en San Juan ese escenario es inviable. “No tenés un mercado que pueda pagar eso. Es imposible trasladar el 100% del aumento, porque no vamos a vender”, advirtió Iglesias.
Ante la baja en el consumo, los panaderos sanjuaninos se vieron obligados a reducir también la producción. “Todos producimos para el día, no podemos stockearnos. Si la venta baja, la producción tiene que ajustarse”, señaló.
Desde el sector aseguran que seguirán resistiendo los aumentos para sostener las ventas, aunque admiten que la situación es cada vez más difícil de sostener.
Op: Juan Llarena
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