Devastador incendio en una fábrica de Rivadavia: pérdidas superiores a $60 millones y una maquinaria única destruida

El siniestro arrasó por completo con “Alicia Telas”, donde trabajaban diez empleados al momento del fuego. El propietario señaló que un posible cortocircuito habría desatado las llamas, que consumieron en minutos materiales altamente inflamables.

Un incendio de gran magnitud destruyó por completo una histórica fábrica de telas ubicada en la intersección de Avenida Ignacio de la Roza y calle Hipólito Yrigoyen, en la zona conocida como “Esquina Colorada”, en Rivadavia. El siniestro, registrado durante la tarde del martes, generó alarma entre vecinos y comerciantes debido a las intensas columnas de humo que se observaron desde varios puntos del departamento.

Bomberos trabajó más de una hora para contener el fuego, que avanzó velozmente sobre materiales altamente inflamables, provocando pérdidas millonarias. Francisco Gómez, propietario de “Alicia Telas”, confirmó que el desastre dejó el galpón en ruinas y que las pérdidas superarían los $60 millones, incluyendo una máquina cortadora de telas valuada en unos $30 millones, la única de ese tipo en San Juan.

El empresario relató que, según testigos, un bajón de tensión habría sido el desencadenante. “Cuando volvió la luz, explotó un foco y cayó encendido sobre goma pluma, que es muy inflamable. Desde ahí se propagó a los blocks de poliéster y ya no hubo nada que hacer”, explicó.

Las llamas avanzaron con tal intensidad que reventaron vidrios y consumieron por completo el interior del galpón. En ese momento, diez trabajadores se encontraban en el lugar; todos lograron salir ilesos y dar aviso a la Policía.

“Hace 63 años que venimos trabajando y luchando para perderlo todo en 10 minutos”, expresó Gómez, visiblemente afectado. Ahora, la empresa espera los resultados de las pericias de Bomberos para confirmar el origen exacto del siniestro.

El devastador incendio deja en suspenso la continuidad de una fábrica emblemática para el rubro textil local y golpea a más de una decena de familias que dependen de la actividad.

Op: Juan Llarena

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