El “Loquillo” se llama Hugo Ariel Heredia, quien admitió su culpabilidad en un juicio abreviado en el que fue condenado por el delito de abuso sexual simple.

La fiscal del caso fue Valentina Bucciarelli, de la UFI Anivi. Conforme surge del resultado de la investigación, se pudo acreditar que siendo aproximadamente las 18 del 3 de septiembre del año pasado, cuando el menor caminaba por calle Río Negro, en Chimbas, hacia la casa de un amigo suyo, fue interceptado por un vecino -apodado “Loquillo”-, quien invitó al niño a pasar a una casa abandonada, al tiempo en que tocaba la cola del menor por debajo de la ropa. El niño se negó, dando aviso de inmediato a su hermano, de 12 años, quien le sugirió contarle de inmediato al padre de ambos, quien momentos después realizó la denuncia.

Al ahora condenado le aplicaron una prohibición de acercamiento a no menos de 500 metros respecto de la víctima, su padre y hermano, al domicilio de éstos y lugares de habitual concurrencia, como así también la prohibición de contacto y actos molestos. Por otro lado, se ordenó para el “Loquillo” el inicio de un tratamiento por consumo de estupefacientes y alcohol, debiendo acreditar ante la Justicia el inicio, continuidad y finalización del mismo.