En un juicio abreviado celebrado en el fuero de Flagrancia, Carlos Javier Rocca Martín fue condenado a tres años de prisión de cumplimiento condicional por asaltar un kiosco en compañía de dos menores y portando un arma de utilería.
El incidente tuvo lugar el 7 de este mes, alrededor de las 21:20, cuando Rocca Martín ingresó al kiosco junto a dos menores de edad, simulando ser un cliente. Mientras las menores permanecían en un pasillo cercano, Rocca Martín solicitó una serie de productos al comerciante, quien comenzó a separarlos sobre un freezer dentro del establecimiento.
Posteriormente, el asaltante requirió más mercancía. En ese momento, sacó de entre sus prendas un objeto similar a una pistola y apuntó al kiosquero. Sorprendido por la situación, el comerciante intentó mantener la calma.
Mientras Rocca Martín exigía la entrega de los productos, la víctima logró ocultamente contactar al 911 desde su celular. Paralelamente, las menores permanecían en un extremo del local. Una vecina, ajena a lo sucedido, ingresó y observó al agresor con el arma. Rocca Martín le ordenó que se retirara del lugar.
Ante la imposibilidad de consumar el robo, el delincuente y las dos menores abandonaron el sitio, dirigiéndose hacia Ignacio de la Roza al Oeste. La policía, alertada por la situación, interceptó a Rocca Martín en las cercanías del Edificio 9 de Julio.
Durante el arresto, el individuo intentó en varias ocasiones sacar el arma de su cintura, lo cual fue observado por los agentes. Posteriormente, Rocca Martín arrojó el arma en la calle, constatándose luego que se trataba de una réplica idéntica a las utilizadas por la Policía, de la marca Bersa.
El juicio abreviado concluyó con la condena de tres años de prisión condicional para Rocca Martín por el delito de robo agravado por el uso de un arma no apta para el disparo.
La sentencia, que implica que el acusado no ingresará a prisión de manera inmediata, genera debate sobre las medidas judiciales aplicadas en casos de este tipo.
OPERADOR: EUGENIA VILA
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