Este jueves se reveló que la pobreza en Argentina alcanzó un alarmante 52,9% en el primer semestre de 2024, marcando el nivel más alto desde 2003. Funcionarios del Gobierno nacional apuntaron a las gestiones anteriores, especialmente las kirchneristas, como responsables de esta situación, al tiempo que resaltaron los esfuerzos del actual Ejecutivo para evitar una crisis aún más profunda. El ministro de Economía, Luis Caputo, afirmó que, sin estas medidas, la pobreza podría haber escalado a niveles de 80 o 90%.
A través de sus redes sociales, Caputo compartió un gráfico del consultor Fernando Marull, el cual, según el ministro, ilustra la diferencia entre un ajuste de mercado y un programa económico estructurado. «Desde una situación mucho menos crítica tras la crisis de 2001, la tasa de pobreza casi se duplicó hasta el 58%. Esto respalda la afirmación del presidente Javier Milei sobre la catástrofe que se logró evitar», aseguró.
Previo al anuncio del índice de pobreza, el Gobierno ya anticipaba cifras preocupantes, buscando suavizar su impacto. El vocero presidencial, Manuel Adorni, recordó cómo la última hiperinflación, entre 1989 y 1990, elevó la pobreza del 20% al 47% en pocos meses. «Sin la hiperinflación, la pobreza podría haber llegado a niveles insostenibles», indicó durante una conferencia de prensa.
El legislador porteño Ramiro Marra fue directo al señalar que «toda la pobreza que hoy sufre el país es culpa del desastre económico y monetario que generó el kirchnerismo». En la misma línea, el diputado José Luis Espert criticó la situación, enfatizando que más del 50% de la población y dos tercios de los menores de 14 años son pobres, describiendo al kirchnerismo como devastador para el país.
El exmandatario Mauricio Macri también se pronunció, responsabilizando a figuras como Sergio Massa, Cristina Kirchner y Alberto Fernández por los actuales índices de pobreza. Según Macri, estos números son «las consecuencias del populismo» y reflejan el «desquicio macroeconómico» perpetuado por el kirchnerismo.
El informe también reveló que la indigencia aumentó al 18,1%, afectando a 8,5 millones de personas. La pobreza infantil, que impacta al 66,1% de los niños de 0 a 14 años, se traduce en 7,3 millones de chicos pobres en el país. Con casi 25 millones de personas en situación de pobreza, el panorama presenta desafíos significativos para el actual Gobierno.
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