Epi 2: Donde bajó el agua, todo es destrucción.

En Bahía Blanca bajó el agua, pero el número de muertos ascendió a 16 y continúa la búsqueda de dos menores y un adulto, que son los únicos tres desaparecidos según el comunicado oficial. El presidente decretó tres días de duelo nacional. Hay casi 1500 personas evacuadas, que fueron distribuidas en 13 centros de alojamiento. Si bien más de la mitad de la ciudad volvió a tener luz, todavía no tienen agua potable. En el temporal «cayeron 400 milímetros de agua, casi lo que llueve en un año en Bahía Blanca»,Âsegún confirmó el intendente de la localidad bonaerense, Federico Susbielles, en una conferencia de prensa. Allí decretó 72 horas de duelo para que los bahienses puedan acompañar a las familias y a las víctimas de esta catástrofe natural. «Lo primero que quiero hacer es expresar el acompañamiento, las condolencias en este momento de tanto dolor», precisó. El intendente informó: «En General Cerri el agua ha bajado y se puede acceder vía terrestre con normalidad, más allá de que hay personas con bastante agua en la casa. El lugar más complejo sigue siendo Ingeniero White. El flujo de agua que bajaba era muy lento. Logramos romper la ruta para que pueda bajar más rápido«.

A medida que bajan un poco las aguas, hubo familias que pudieron festejar algo tan simple como haberse podido tomar un mate caliente. Una jubilada de 68 años contaba en plena angustia que pudieron salvar a su madre que estaba en un geriátrico, pero que en su casa en Ingeniero White «la heladera, el lavarropas y el freezer flotaban». «Nos salvamos todos», agradeció con pena, pero agregó: «Estamos mal, somos jubilados los dos con la mínima, que no alcanza para nada«.

«Estábamos acostados. Nunca me imaginé que podía pasar esto. Nunca se había inundado esta zona de casas», comentó. En su casa, el agua todavía sigue alta. En otros lugares del barrio, siguieron evacuando personas este domingo, pero incluso con niveles de agua altos, muchas personas deciden quedarse a proteger sus cosas. Los vecinos necesitan bombas de agua para extraerla de sus hogares.

Medidas de acción

El Ministerio de Desarrollo de la Comunidad de la Provincia envió a 69 personas de un equipo de asistencia humanitaria, que cuenta con enfermeros, socorristas, psicólogos, bomberos y logísticos. Envió también cuatro camionetas, un micro doble piso, dos lanchas para evacuación y cuatro kayaks. Aparte, el ministerio instaló una cocina y un consultorio móvil, y cuatro carpas de atención primaria de la salud.

Además acercó a los afectados donaciones de ropa, agua envasada, kits de limpieza y alimentos no perecederos. En la zona también trabajan 32 socorristas locales de Punta Alta.

Para que toda la ciudad del sur de la Provincia de Buenos Aires recupere el servicio eléctrico están trabajando 400 operarios de la distribuidora local y 100 contratistas adicionales, pero en las próximas horas llegarán refuerzos de otras distribuidoras de la provincia.

Sin embargo, incluso la comunicación del gobierno nacional es ineficiente: el intendente de Bahía Blanca se enteró del envío de 10 millones de pesos por las redes sociales. El ministro de Economía, Luis Caputo, publicó un tweet y se desligó deseando «Ojalá las cosas mejoren pronto! (sic)». Susbielles respondió: «Me parece importante que se colabore con los bahienses, más allá que vamos a necesitar 40 mil millones de pesos para reconstruir la Ciudad».

La reconstrucción será difícil, ya que la Dirección Nacional de Asistencia en Situaciones de Emergencia Social fue desmantelada por el Ministerio de Capital Humano. La Dirección acompañaba desde el territorio las emergencias proveyendo agua y elementos de primera necesidad, y acompañando a las familias una vez pasada la catástrofe. Mucha gente en esta inundación perdió su documentación y muchas oficinas estatales fueron afectadas. El Gobierno provincial adelantó que acercará personal para que los damnificados puedan volver a tramitar su DNI.

Temporales inéditos

Las áreas más comprometidas son los barrios cercanos al canal Maldonado y el Arroyo Napostá. El temporal provocó el desborde de calles y de estos dos arroyos. Con esto, se perdió el 70% de la capacidad operativa: «Hasta las 10 horas pudimos hacer salvatajes pero cuando los canales desbordaron, ya se tornó imposible. Fueron momentos muy difíciles, eternos. Llovió hasta las 16 horas», relató el intendente.

En el caso del canal Maldonado, la crecida del agua provocó la ruptura de varios de los puentes que permiten el cruce de un sector a otro de la ciudad. «La tormenta nos aisló, porque rompió buena parte de los accesos a la ciudad, con lo cual el convoy de la armada argentina tuvo que dar rodeos para llegar a la ciudad. Lo hizo a las 19:30«, continuó el funcionario.

Militantes ambientalistas advirtieron que esto se debe a la crisis climática y que hay que actuar en consecuencia. Hugo Pizzi, médico infectólogo, destacó: «Ante estos fenómenos meteorológicos, es muy poco lo que puede hacer el ser humano. En septiembre nos avisaron que iban a venir fenómenos meteorológicos donde van a existir cuadros o regímenes pluviométricos alterados que van a tener 200 milímetros en  2 horas, 300 en 3 horas».

Con esta advertencia científica, si el Gobierno Nacional hubiera destinado fondos, se hubiera podido prevenir y mejorar la infraestructura para emergencias de este estilo. Sólo dos helicópteros del Estado Nacional están trabajando en la zona: tardaron en llegar porque estaban lejos y las condiciones climáticas le dificultaban la tarea, pero ahora llevan donaciones del stock de Capital Humano.

El Ministerio de Defensa colaboró con vehículos Unimog, Robus y BMW y botes de la Compañía de Comandos 603, pero no es suficiente. Desde ningún área nacional se brindaron los medios para extraer el agua.

En diciembre de 2023, esta misma ciudad sufrió el paso de un tornado y la respuesta de las autoridades libertarias fue no dar asistencia de ningún tipo. En esta ocasión, el gobernador Axel Kicillof reiteró que era necesario dejar a un costado las diferencias políticas existentes en favor de los bonaerenses afectados y la Nación accedió a conformar un Comité de Crisis.

«Conciencia de fragilidad»

El impacto de estas catástrofes es fuerte, también en la salud mental: «son todas cosas terribles porque el ser humano toma conciencia de la finitud y de la fragilidad», afirmó el médico Pizzi. Alertó que en las zonas afectadas debe prestarse especial atención a la vacunación: en especial a la hepatitis, que forma parte del calendario nacional.

Todo esto se da en el contexto de 100 trabajadores despedido en el Servicio Meteorológico Nacional, casi un 15 por ciento del personal. Es evidente que las alertas llegaron tarde a Bahía Blanca.

Presidencia de la Nación anunció que decretará tres días de duelo nacional «por el fallecimiento de compatriotas en el temporal del viernes pasado». En el comunicado alardearon de que «en tiempo récord desde que se dispararon las alertas sobre esta catástrofe, el gobierno nacional puso a disposición todos sus recursos para tareas de rescate, evacuación, tratamiento médico, alojamiento y más».

Vialidad Nacional informó los trabajos realizados hasta ahora: desvíos y reconstrucción de calzadas en la Ruta 3, la inspección de la Ruta 35 donde varios kilómetros estaban cortados por socavones y la rotura de la Ruta 252 para desagotar el agua «que permanecía anegando una zona de viviendas donde superaba el metro de altura».

«La ciudad ha sufrido daños viales muy graves. Están tendiendo puentes de Entre Ríos en la Ruta 3. Gran parte de los puentes se han destruido. Ha quedado un sólo lugar del paso«, detalló el funcionario.

Sin precipitaciones, la ciudad sigue en tensión, con niveles altos de agua y un Estado Nacional que no termina de desplegar todo su potencial. Además, continúa –con pocas expectativas– la búsqueda por las niñas de uno y cinco años que fueron arrastradas por las correntadas.