Alerta pymes: fuerte caída del empleo industrial y la producción por las importaciones
Para 2025, las expectativas son optimistas, aunque la industria enfrenta amenazas como el aumento de importaciones, altos costos de producción e incertidumbre sobre la demanda.

El Observatorio PyME publicó el “Informe Coyuntural IV trimestre 2024”, contiene un análisis del desempeño económico y las principales problemáticas de las PyME manufactureras y de software y servicios informáticos durante el IV trimestre 2024.
Reuters
En el IV-2024, la producción industrial cayó un 10% interanual y el empleo un 6%, mientras que las ventas deflactadas crecieron un 15%, registrando su primera suba anual desde principios de 2022. A pesar del incremento en ventas, para los observadores persisten dudas sobre si este repunte se debe a una verdadera reactivación o a la liquidación de stocks a bajo precio y la sustitución de producción local por importaciones.
El índice PMI-PyME, que mide la actividad manufacturera, cayó a 47 puntos, revirtiendo las mejoras previas y reflejando un leve retroceso. En contraste, el índice de confianza empresarial (ICE-PyME) mantuvo una tendencia optimista desde octubre de 2023, mostrando una brecha entre la coyuntura actual y la percepción empresarial a futuro.
El índice de precios de las PyME manufactureras continúa por debajo del índice de Precios al Consumidor (IPC) y del mayorista manufacturero, generando tensiones en la rentabilidad. Solo el 43% de las empresas pudo trasladar los costos al precio final en el IV-2024, frente al 52% del trimestre anterior. En este contexto, el 81% reportó aumentos en los costos de producción y se mantuvo la suba en el índice de salarios PyME.
Software y servicios informáticos: crecimiento sostenido pero con desaceleración
El sector de software y servicios informáticos mantuvo tasas de crecimiento positivas en 2024, aunque inferiores a los niveles pospandemia. La primera mitad del año mostró una desaceleración, mientras que la segunda exhibió una aceleración, con un crecimiento interanual del 20% en ventas deflactadas y del 3% en empleo en el IV-2024.
El índice ICE-PyME del sector reflejó un optimismo sostenido, impulsado por una mejora en las condiciones actuales. Sin embargo, los precios en el sector continúan con un rezago frente al IPC y al tipo de cambio, lo que afecta su competitividad.
Cuáles son los principales problemas de las pymes en 2025
Las industrias manufactureras enfrentan problemas típicos de recesión: el 66% reporta preocupación por la caída de ventas y el 54% por el aumento de costos salariales. Además, crece la preocupación por la competencia de productos importados, con un 28% de incidencia en febrero de 2025 (frente al 20% en octubre de 2024).
Las empresas de software y servicios informáticos enfrentan desafíos relacionados con la expansión y la demanda futura. Disminuyeron las preocupaciones sobre la inestabilidad social, política y económica (del 78% en octubre de 2024 al 54% en febrero de 2025) y las restricciones de financiamiento (del 53% al 41%).
¿Cuáles son las expectativas y desafíos para 2025?
Para 2025, las expectativas en la industria manufacturera muestran un panorama mixto: el 47% de las pyme espera un aumento en la producción y el 51% proyecta una suba en ventas. Sin embargo, las previsiones para inversión (34%) y empleo (16%) son más moderadas. Aproximadamente el 50% de las empresas no espera una recuperación, lo que evidencia la fragmentación del sector.
En el sector de software y servicios informáticos, las perspectivas son más positivas: el 68% prevé un aumento en ventas y el 55% proyecta una mayor contratación en 2025.
A pesar de la mejora en las expectativas, persisten factores de incertidumbre. En la industria manufacturera, la debilidad de la demanda, los costos de producción y la competencia de importaciones son los principales desafíos. En software y servicios informáticos, la falta de demanda y el alto costo de operación siguen siendo preocupaciones clave, sumadas a la dificultad para encontrar personal calificado.
Tras un 2024 de ajustes económicos, 2025 presenta mejores perspectivas, aunque con tensiones en costos y sostenibilidad de la demanda. En particular, las pyme manufactureras enfrentan un escenario desafiante por la apreciación cambiaria, la apertura importadora y la falta de incentivos para la producción local, factores que amenazan el empleo y la capacidad productiva del sector.
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