Una amenaza de bomba generó tensión este viernes en el Instituto Penal de Chimbas. Todo comenzó con un llamado anónimo al 911 que alertó sobre la supuesta presencia de un artefacto explosivo dentro del Servicio Penitenciario. La voz masculina que realizó el aviso quedó registrada en la comunicación y fue clave para activar el protocolo de seguridad.
La fiscal Daniela Pringles tomó intervención inmediata en el caso y ordenó una requisa sectorizada dentro del penal, donde permanecen alrededor de 1.800 internos. Las autoridades decidieron no evacuar a la población carcelaria, pero sí desplegar un operativo minucioso en cada pabellón.
Fuentes policiales confirmaron que el número desde el cual se hizo la llamada está registrado en la provincia de San Juan. Los investigadores ya trabajan en la geolocalización del dispositivo y en el análisis de la voz para identificar al autor de la amenaza.
Este nuevo episodio se suma a una serie de llamadas similares que en las últimas semanas afectaron a escuelas, dependencias estatales y el Centro Cívico, generando preocupación y reforzando los protocolos de emergencia en toda la provincia.
Mientras avanza la inspección en el penal, se aguardan novedades sobre el resultado de la requisa y los pasos judiciales que seguirá la causa. Las autoridades reiteraron que todas las amenazas serán investigadas y sancionadas de acuerdo al marco legal vigente.
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