A seis años de la tragedia en ambulancia, la familia de Danilo Castillo reclama justicia: “Nos están viendo la cara”
Mañana comenzará el juicio contra el chofer de la ambulancia, único imputado por el accidente que causó la muerte de dos pacientes que iban a dializarse. La familia cuestiona el accionar de la Justicia.
Este jueves se iniciará el juicio por la trágica colisión ocurrida en junio de 2019 en Chimbas, en la que perdieron la vida Danilo Castillo (14) y Juan Carlos Oviedo (62), ambos pacientes que viajaban en ambulancia para realizarse diálisis. El proceso judicial tendrá como único acusado al chofer del vehículo sanitario, Eduardo Cano, lo que generó profunda indignación en la familia de las víctimas.
El siniestro ocurrió el 28 de junio de 2019, en el cruce de 25 de Mayo y Díaz, cuando la ambulancia fue embestida por un auto, provocando su vuelco y posterior tragedia. Desde un primer momento, las sospechas apuntaron a Rodrigo Fernando Díaz, conductor del auto, quien habría circulado a alta velocidad y bajo los efectos del alcohol, según testigos. Sin embargo, la Justicia no pudo comprobar estas versiones y, tras pasar tres meses detenido, Díaz fue liberado y sobreseído en diciembre de 2020.
Frente a este escenario, la hermana de Danilo, Micaela Castillo, expresó su dolor y enojo en una entrevista con Demasiada Información (Radio Light):
“Están todos sobreseídos. La Justicia dictaminó que el culpable es el chofer de la ambulancia porque el auto tenía la derecha. Nos están jodiendo, nos están viendo la cara. Es muy injusto. El inocente es el culpable y el culpable anda libre.”
Micaela agregó que Cano dio negativo en el test de alcoholemia, mientras que Díaz se fugó tras el impacto y abandonó a las víctimas en el lugar. La familia insiste en que se investigue nuevamente la responsabilidad del automovilista y que el juicio no recaiga únicamente sobre el conductor de la ambulancia, quien “venía cumpliendo con su trabajo”.
La causa, que conmocionó a la provincia en su momento, se reabre ahora con el inicio del juicio oral. Para los allegados a las víctimas, es una oportunidad para visibilizar un reclamo que sienten postergado por la Justicia.
Op: Juan Llarena
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