El modus operandi utilizado por los delincuentes fue el phishing, una técnica que implica duplicar una página web legítima para engañar al usuario y robar sus datos personales, contraseñas y otra información sensible.

El administrador de la empresa, con sede en Buenos Aires pero con una pequeña oficina en San Juan, intentó realizar el pago a través del portal bancario desde su computadora. Sin embargo, ingresó a una versión falsa del sitio, donde proporcionó sus datos de acceso sin saberlo.

Después de ingresar los datos, la pantalla se congeló y apareció un mensaje falso que indicaba un reinicio del sistema. Mientras tanto, en otra computadora, otro empleado de la empresa intentó acceder al sitio bancario original y descubrió que todo el dinero había desaparecido.

La estafa resultó en la transferencia de los 88 millones de pesos en 18 transacciones separadas, cada una por un valor de 4.900.000 pesos, en tan solo 3 minutos. La denuncia fue presentada ante la UFI Delitos Informáticos y Estafas el 7 de mayo, y se tomaron medidas para bloquear las cuentas bancarias utilizadas en las transferencias.

La investigación continuará en la Fiscalía de Delitos Informáticos en Buenos Aires, donde está registrada la empresa y se encuentran los principales involucrados y testigos del incidente. El phishing, utilizado en esta estafa, es una táctica común donde los estafadores crean páginas web falsas de instituciones financieras conocidas para engañar a las personas y robar su información confidencial.