Según el relato, al principio no había agua en la zona, por lo que las familias eligieron una sombra cerca de la poca agua que corría para pasar una tarde en familia. Sin embargo, 40 minutos después, la situación dio un giro inesperado.

Las compuertas del dique Punta Negra se abrieron, y el agua inundó el lugar en cuestión de minutos, sin darles tiempo a reaccionar. El nivel del agua subió rápidamente, dejando atrapadas a las camionetas de las familias. Bomberos y personas presentes en la zona se unieron para ayudar a sacar los vehículos del agua.

En otro incidente similar en otra parte del río, la crecida también sorprendió a un grupo de personas que tuvieron que ser rescatadas por Bomberos y otros presentes en el lugar. Aunque no tenían vehículos, perdieron sillas, conservadoras y otros elementos de picnic debido a la fuerza de la corriente.