En un oscuro capítulo de violencia de género, Yanina Pérez, de 44 años, fue brutalmente asesinada este jueves en Angaco, víctima de múltiples puñaladas propinadas por su exmarido, Omar Pérez. Este trágico suceso rememora un episodio previo de horror: en enero de 2020, Yanina había sido atacada por el mismo individuo.
El cuerpo sin vida de Yanina Pérez fue encontrado abandonado en la entrada del cementerio de Angaco, marcado por cinco puñaladas que le segaron la vida. La víctima, quien desempeñaba sus labores en el municipio local, había soportado durante años incesantes episodios de violencia sexista y había sido objeto de un intento de femicidio en el año 2020.
Las autoridades señalan a Omar Pérez como el principal sospechoso, quien actualmente está siendo intensamente buscado en la zona del ataque. Según informes judiciales, se llevó a cabo un allanamiento en una residencia ubicada en la calle Malvinas Argentinas y Nacional, aunque el sospechoso no fue hallado. «Se recogieron muestras olfativas de las prendas presentes en el lugar para facilitar la búsqueda con ayuda de perros entrenados», indicó un comunicado oficial.
El incidente que preludió el trágico desenlace de Yanina se remonta al 16 de enero de 2020, cuando la mujer sufrió un brutal ataque a cuchilladas por parte de su expareja mientras intentaba ingresar a su domicilio. Este escalofriante caso de violencia de género la dejó gravemente herida, siendo ingresada en el Hospital Guillermo Rawson, mientras que su agresor permaneció prófugo de la justicia.
El femicidio de Yanina Pérez no solo representa una dolorosa pérdida para su familia y la comunidad de Angaco, sino que también evidencia las profundas falencias en el sistema de protección y prevención de la violencia de género en la sociedad.
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