Propietarios y conductores de remises se congregaron en la conocida «esquina colorada» de Ignacio de la Roza e Hipólito Irigoyen para expresar su descontento por los descuentos implementados en las tarifas a través de la aplicación de una reconocida empresa sanjuanina.
El malestar entre los choferes surge a raíz de la aplicación de descuentos a los pasajeros, medida que no cuenta con el respaldo de varios representantes de las unidades. La protesta tuvo lugar en respuesta a estas acciones que, según los conductores, están resultando en pérdidas económicas significativas.
«Si el aumento de tarifa es del 65%, no pueden obligarnos a aplicar descuentos. Estamos aquí, los choferes y dueños de autos, para pedir que eliminen ese filtro de la aplicación porque estamos perdiendo dinero. Logramos el aumento de tarifa, pero con el descuento, lo perdemos todo», expresó uno de los conductores en declaraciones.
El aumento de la tarifa del 65%, instaurado el 22 de diciembre de 2023 tras prolongados reclamos durante la gestión anterior, estableció que la bajada de bandera autorizada pasara a costar $490 en horario diurno y $539 en horario nocturno. El costo por cada 100 metros ascendió a $33 (diurno) y $36 (nocturno), mientras que el valor del kilómetro se fijó en $327 (diurno) y $360 (nocturno). Además, la espera de 40 segundos tiene un costo de $33 (diurno) y $36 (nocturno), y la hora de espera fue establecida en $2947 (diurno) y $3240 (nocturno) respectivamente.
El desacuerdo entre la empresa y los choferes de remises ha generado tensiones, evidenciando la discrepancia en torno a las tarifas y descuentos, lo que podría desencadenar futuras acciones de protesta si no se llega a un acuerdo satisfactorio para ambas partes.
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