Intentó matar a su expareja, creyó haberla asesinado y confesó el crimen a su hija: fue condenado a 10 años de prisión
Raúl Ariel Salinas atacó brutalmente a su expareja en Chimbas. Pensó que la había matado y llamó a su hija para decirle “maté a tu madre”. Este martes, fue condenado por tentativa de homicidio agravado por el vínculo y por mediar violencia de género.
La siesta del 26 de diciembre de 2024 quedó marcada como uno de los episodios más estremecedores de violencia de género en San Juan. En una vivienda de Chimbas, Raúl Ariel Salinas atacó de manera salvaje a su expareja, madre de sus hijos, con un cuchillo tipo Tramontina. La mujer logró sobrevivir tras sufrir múltiples heridas cortantes y golpes en distintas partes del cuerpo.
Según la investigación judicial, la agresión comenzó en medio de una discusión dentro del domicilio. Salinas arrojó un vaso de vidrio al rostro de la mujer y, fuera de sí, continuó atacándola con el vidrio roto. Luego tomó un cuchillo y la apuñaló en el cuello, la mandíbula y el brazo izquierdo.
La víctima cayó al suelo y el agresor la arrastró de los cabellos hasta la vereda, dejando un rastro de sangre desde el interior de la casa hasta la acequia. Mientras la insultaba y le gritaba que iba a morir, vecinos horrorizados llamaron al 911, lo que permitió que la Policía y una ambulancia llegaran a tiempo para salvarle la vida.
La mujer fue trasladada de urgencia al Hospital Rawson, donde fue intervenida quirúrgicamente y permaneció varios días internada en terapia intensiva. El informe médico confirmó que las heridas eran de extrema gravedad y que sobrevivió de milagro.
Convencido de que la había matado, Salinas regresó a la casa y llamó a su hija mayor, a quien le dijo: “Maté a tu madre”. Esa llamada, junto con los testimonios vecinales, se convirtió en una de las pruebas más contundentes en su contra.
Durante la investigación, la Policía secuestró el arma blanca utilizada, un cuaderno con escritos sobre conflictos con su ex pareja, y el teléfono con el registro de la llamada. Los peritajes genéticos confirmaron la presencia de sangre de ambos en el cuchillo.
Este martes, ante el juez Maximiliano Barbera, Salinas admitió su responsabilidad y firmó un acuerdo de juicio abreviado para evitar el juicio oral. Fue condenado a 10 años de prisión efectiva por el delito de tentativa de homicidio agravado por el vínculo y por mediar violencia de género.
La causa fue investigada por la UFI CAVIG, bajo la intervención del fiscal Leonardo Arancibia, quien destacó la brutalidad del ataque y el riesgo real de muerte que enfrentó la víctima. En su sentencia, el juez Barbera subrayó que el accionar del imputado “atentó directamente contra el bien jurídico más protegido: la vida”.
Raúl Salinas llevaba diez meses detenido y continuará cumpliendo su condena en el Servicio Penitenciario Provincial de Chimbas. La víctima, en tanto, recibe acompañamiento psicológico y permanece bajo medidas de protección.
El caso volvió a poner en evidencia la gravedad de la violencia machista y la necesidad de reforzar las redes de contención y denuncia para las víctimas.
POR LIC. EUGENIA VILA
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