La megacausa por estafas inmobiliarias que tiene como imputados a Denise Robles Bonade y Rubén Ángel Martín González sigue creciendo. Este viernes, durante una audiencia ante el juez de Garantías Gerardo Fernández Caussi, el fiscal Guillermo Heredia detalló dos nuevos hechos que amplían la lista de víctimas y agravan la situación judicial de la pareja.
Uno de los episodios más graves involucra un loteo en Chimbas. Según la fiscalía, en 2017 González firmó un contrato con el dueño de un predio de cuatro hectáreas, de apellido Triguillo, para urbanizar y subdividir los terrenos. El proyecto nunca se ejecutó, pero el acusado vendió al menos 17 lotes, cobrando anticipos de entre $10.000 y $20.000, además de cuotas durante ocho años. Cada damnificado pagó entre $2 y $3 millones, lo que eleva el perjuicio total a más de $70 millones.
El fiscal también imputó a González por la venta irregular de un departamento en Capital. En 2019, se comprometió a terminar cuatro unidades a cambio de quedarse con dos. Aunque la obra se completó, habría persuadido a uno de los socios originales, de apellido Lazcano, de canjear su departamento por otras propiedades que nunca se concretaron. Mientras tanto, González vendió el inmueble a una mujer de apellido Nebro, que abonó $2 millones y actualmente enfrenta un juicio civil por desalojo, ya que el acusado no era el titular legítimo de la propiedad.
Antes de esta audiencia, Robles Bonade acumulaba 101 hechos imputados y González 102, pero las nuevas denuncias suman más cargos y amplían la gravedad de la causa. Los defensores Fernando Castro y Franco Montes participaron de la audiencia, al igual que los abogados querellantes, que siguieron el proceso por Zoom.
La investigación, que ya se perfila como una de las mayores estafas inmobiliarias de San Juan, continúa abierta. Las autoridades judiciales no descartan que surjan nuevas víctimas y se sumen más hechos ilícitos a la causa.
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