El Foro de Abogados le quitó la matrícula a Julián Gil tras su condena por encubrimiento
El exintendente de Caucete no podrá ejercer como abogado, aunque tiene instancias de apelación. El fallo fue unánime en el Tribunal de Disciplina.
El Tribunal de Disciplina del Foro de Abogados de San Juan resolvió excluir de la matrícula profesional a Julián Gil, exintendente de Caucete, tras su condena penal por encubrimiento agravado. La sanción implica que no podrá ejercer la abogacía de por vida, aunque la medida todavía puede ser apelada.
Gil fue condenado en 2024 a un año de prisión en suspenso, en el marco de un juicio abreviado, por haber intentado influir en la declaración de una víctima de abuso sexual a fin de favorecer a un cliente. La jueza Verónica Chiconi homologó el acuerdo y dictó la pena, que se convirtió en antecedente clave para la sanción disciplinaria.
La ley 127 A, Orgánica del Ejercicio de la Abogacía, establece que la exclusión de la matrícula procede en casos de “condena judicial firme cuando el hecho afecta el decoro y la ética profesional”. En ese marco, el Tribunal —integrado por Cala Nale, Elena Beatriz Quiroga, Valeria Díaz, Federico Molinero y María Daniela Martínez— resolvió por unanimidad aplicar la sanción.
Gil ya fue notificado y tiene la posibilidad de apelar ante el Directorio del Foro de Abogados, en un plazo de 25 días hábiles. Si el órgano confirma la resolución, podrá recurrir al Juzgado Contencioso Administrativo. En tanto, la apelación suspende de manera provisoria la sanción hasta que quede firme.
El exintendente de Caucete había recibido su título de abogado en junio de 2019 y se matriculó en agosto de ese mismo año. Tras dejar la gestión municipal (2015-2019), ejerció la profesión hasta que nuevamente quedó envuelto en un escándalo.
Su paso por la política estuvo marcado por fuertes controversias: intentos fallidos de reelección, denuncias por nepotismo, enfrentamientos con el Concejo Deliberante, cuestionamientos del Tribunal de Cuentas y hasta una acusación por abuso sexual que fue archivada.
En el plano profesional, su condena por encubrimiento desató la intervención de oficio del Foro y terminó con la sanción máxima prevista.
Si la exclusión llegara a quedar firme, Gil solo podría solicitar la rehabilitación de su matrícula después de cinco años, siempre que lo aprueben las dos terceras partes de los miembros del Tribunal de Disciplina.
Los comentarios están cerrados.