Pioneros en la educación inicial: los maestros jardineros que desafían estereotipos en San Juan

Marcelo, Cristian y Miguel forman parte de un reducido grupo de docentes varones que trabajan en el Nivel Inicial, aportando una mirada diferente y enriquecedora en las salas de los jardines de infantes de la provincia.

En un nivel educativo tradicionalmente vinculado a lo femenino, la presencia de maestros jardineros varones en San Juan es prácticamente excepcional. Actualmente, sólo cinco hombres se desempeñan en esta función, lo que representa apenas un 0,3% del total de 1.678 docentes de Nivel Inicial en la provincia. Sin embargo, su trabajo rompe con los moldes y abre nuevas posibilidades pedagógicas que valoran la diversidad y la inclusión.

La ministra de Educación, Silvia Fuentes, destacó que “aunque son minoría, su presencia se siente en diferentes jardines de la provincia. Con sensibilidad, creatividad y ternura, demuestran que la labor educativa en la primera infancia trasciende los estereotipos y los géneros”.

Marcelo Ángulo: un referente con 25 años de historia

Marcelo es uno de los maestros jardineros con mayor trayectoria en el departamento 25 de Mayo. Titular del ENI Nº 54, ha trabajado en prácticamente todas las escuelas del departamento. Recuerda sus inicios cuando apenas eran dos hombres estudiando para esta profesión, y hoy celebra que la presencia masculina aporte “una mirada distinta que enriquece la experiencia educativa”. Su mensaje es claro: “Espero que cada vez más varones se sumen a este nivel”.

Cristian Mallea: una vocación que nunca se apagó

Cristian, que se desempeña en el ENI Nº 68 del Complejo Educativo Valle Grande, fue el primer maestro jardinero varón de Jáchal. Aunque se recibió en 1999, no titularizó hasta 2019. “Elegí esta carrera por convicción. A pesar de que la vida me llevó por otros caminos, siempre supe que esta era mi vocación”, explica. Para Cristian, trabajar en Nivel Inicial es “una enorme responsabilidad y una alegría inmensa”.

Miguel Pastor: el maestro jardinero que encontró su lugar por casualidad

En Caucete, Miguel ejerce en el JINZ Nº 55 de la Escuela José M. de los Ríos. Inicialmente maestro de primaria, su llegada al Nivel Inicial fue inesperada. “Cuando me nombraron, no sabía muy bien qué me esperaba, pero encontré un espacio que me hace sentir muy bien”, cuenta. Miguel suma humor y alegría a las aulas: “Soy un payaso más, y me encanta serlo”.

Estos testimonios muestran cómo los maestros jardineros varones no sólo están presentes, sino que también transforman y enriquecen la educación en la primera infancia en San Juan, aportando una diversidad que rompe estereotipos y abre camino para futuras generaciones.

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