El consumo de carne sigue en caída en San Juan: buscan reactivar ventas con ofertas y cortes económicos
Con una demanda en mínimos históricos y el poder adquisitivo en retroceso, el sector cárnico local descarta aumentos de precios y se vuelca a estrategias comerciales para sostener la actividad. Las carnicerías exploran promociones y opciones más accesibles para enfrentar la crisis.
El consumo de carne en San Juan atraviesa uno de sus momentos más críticos. Con ventas en niveles muy bajos y sin perspectivas de recuperación en el corto plazo, desde el sector aseguran que no habrá aumentos de precios mientras no se reactive la demanda. En este contexto, las carnicerías apuestan por ofertas, promociones y cortes económicos para sostener la actividad.
“Al no haber consumo, el precio se mantendrá estable, ya que no existen expectativas de un aumento en las ventas”, explicó Sebastián Parra, referente provincial del rubro cárnico. Según detalló, el sector arrastra un año y medio de caída sostenida en las ventas, en gran parte por el deterioro del poder adquisitivo de los consumidores.
“La gente no tiene dinero. Muchas personas tienen sueldos por debajo del millón de pesos, y lo poco que les queda, después de pagar servicios básicos, lo destinan a lo esencial: comida y vestimenta. Eso los lleva a buscar precios más bajos u optar por otras alternativas”, indicó.
Parra subrayó que el precio de la carne responde a la lógica de oferta y demanda. “Hoy por hoy, la demanda es muy baja, y eso frena cualquier posibilidad de suba”, afirmó. No obstante, advirtió que al ser un año electoral, el escenario podría modificarse si se implementan medidas que reactiven el consumo.
Frente a esta situación, las carnicerías están aplicando distintas estrategias comerciales. Entre ellas, se destacan la revalorización de cortes tradicionales de bajo costo —como la marota con hueso de cogote— y la oferta de carne mezclada con hueso, que permite presentar precios más accesibles en góndola.
Aunque las promociones no generan grandes volúmenes de venta, el objetivo es sostener al menos un mínimo flujo de clientes. “La idea es que la gente salga, dé una vuelta por el comercio y se mantenga un poco de movimiento”, señaló Parra.
En fechas especiales, como el Día del Padre, se registra un leve repunte, pero no alcanza para revertir la tendencia. “Se trabajó un poco mejor durante ese fin de semana, pero fueron solo tres días. No es algo que se mantenga”, aclaró.
A nivel local, los precios de la carne se han mantenido relativamente estables desde octubre de 2023 hasta el mismo mes de 2024, más allá de algunos aumentos puntuales que no lograron sostenerse en el tiempo.
En el plano nacional, el panorama no es muy distinto. Según datos del sector, en lo que va de 2024 el consumo de carne cayó un 11,4 % respecto al año anterior, que ya había marcado una baja considerable. Incluso la carne de cerdo, que en años anteriores funcionó como una alternativa más económica, ha perdido atractivo frente al contexto actual.
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