Con el avance del proyecto minero Hualilán, el departamento de Ullum dio los primeros pasos para que sus comerciantes y emprendedores puedan sumarse a la cadena de valor de la actividad minera. Sin embargo, desde la Municipalidad detectaron que la mayoría de los potenciales proveedores locales aún no cumplen con los requisitos legales y formales que exige este tipo de industria. Por eso, iniciaron un proceso para capacitarlos y acompañarlos en su regularización.
La iniciativa surge en el marco de la Mesa de la Minería departamental, donde ya se concretaron encuentros con cámaras provinciales de proveedores mineros. El próximo paso será una reunión con Challenger Gold, la empresa a cargo del yacimiento aurífero, para conocer en detalle qué requisitos deberán cumplir los proveedores locales para poder ofrecer sus bienes y servicios.
“Queremos que los ulluneros estén preparados y puedan aprovechar esta oportunidad. Para eso necesitamos saber qué exige la empresa y trabajar desde ahora”, explicó el intendente David Domínguez, quien agregó que el objetivo es lograr que la inversión minera tenga “un impacto positivo en la comunidad” y construir la tan mencionada “licencia social”.
Un proyecto histórico con nuevo impulso
Hualilán es uno de los yacimientos de oro más antiguos del país, con antecedentes de explotación que se remontan al siglo XIX y que tuvieron un nuevo capítulo en la década del ’80. En 2024, el proyecto recibió la Declaración de Impacto Ambiental para iniciar una nueva etapa de producción, esta vez bajo los estándares actuales de sustentabilidad y responsabilidad social. Aunque el yacimiento se ubica a más de 100 kilómetros de la Villa Cabecera, Ullum fue reconocido como comunidad de influencia, lo que implica compromisos directos por parte de la empresa.
Desafíos locales: informalidad y escala
Uno de los principales obstáculos detectados por la gestión municipal tiene que ver con la escasa formalidad de los emprendimientos del departamento. Muchas de las microempresas y cooperativas actuales no cuentan con inscripción legal, lo que les impide acceder a contratos con la minera.
“Vamos a brindar asesoramiento técnico y legal para que puedan ponerse al día. Si hace falta, ayudar a constituir sociedades o cooperativas, e incluso fomentar que se asocien entre sí para ganar escala”, indicó Domínguez.
Además, se evalúa la posibilidad de que los comerciantes locales formen UTE (Uniones Transitorias de Empresas) con proveedores mineros de otras zonas de San Juan, lo que podría facilitar su inclusión en el circuito de compras del proyecto.
Formación para el empleo
Otro eje del trabajo será la capacitación de mano de obra local. Desde el municipio explicaron que también se apunta a que más vecinos del departamento puedan acceder a los futuros empleos que generará la actividad minera, tanto en la etapa de construcción como en la de producción.
Cambios en los plazos
Inicialmente, se esperaba que la explotación en Hualilán comenzara en julio. Sin embargo, desde la empresa informaron que el proceso se trasladará a las instalaciones de Casposo, en Calingasta, donde se hará el procesamiento del mineral. Esta modificación podría demorar el inicio de las obras, aunque en Ullum decidieron no perder el tiempo y seguir preparándose.
“Sabemos que puede llevar tiempo, pero si no arrancamos ahora, vamos a quedar afuera. Este proyecto puede marcar un antes y un después para Ullum, y queremos estar a la altura”, cerró el intendente.
Rivero. C
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