La Justicia de Rosario imputará a un hombre que se desempeña como empleado en el servicio de seguridad de una empresa privada de eventos por presunto abuso sexual de una estudiante en su fiesta de graduación.
Según consignaron fuentes locales, el hecho habría ocurrido el 14 de diciembre pasado cuando la víctima, alumna de la Escuela San Carlos de San Lorenzo, celebraba con sus compañeros el egreso en el camping de un sindicato de la localidad de Luis Palacios.
De acuerdo a la denuncia, a la madrugada los padres y otras personas se retiraron del lugar, mientras los demás chicos esperaban un transporte que habían reservado con el objetivo de retornar a San Lorenzo al finalizar el evento.
La víctima, una estudiante cuya identidad se encuentra protegida bajo reserva, fue encontrada inconsciente en uno de los baños del lugar.

Al volver en sí y al empezar a recuperar el conocimiento, la estudiante que hizo la denuncia pudo comenzar a reconstruir un relato de lo sucedido.
La madre de la víctima relató, además, que su hija se había acercado a la barra del salón de fiestas para comprar un trago.

Tras ingerirlo, según relató, empezó «a sentirse mal». Luego un individuo del personal de seguridad «comenzó a molestarla» y la condujo al exterior del predio en el que trancurría la celebración con la promesa de brindarle ayuda.
En este sentido, la mamá señaló que la damnificada fue sacada del lugar del festejo «a la fuerza», es decir, especificó que ella «le decía que no» al patovica, pero éste «la agarró del brazo y se la llevó a la fuerza».

Y agregó: «Nadie vio nada». «Ninguno lo detuvo siendo que era un empleado y salía con una menor del salón cuando a nosotros como invitados no nos dejaban salir al patio y él la sacó como si nada», declaró la mamá de la víctima.
Según la descripción de los hechos de la mamá de la denunciante: este hombre a cargo de la seguridad la habría llevado a «un descampado». Y la habría empezado «a besar, a manosear», declaró la mujer.

«Cuando ella le dice que no, que lo empuja, la muerde y le pega», continuó el relato.
Conforme al testimonio de la madre, su hija salió corriendo y se encerró en el baño, donde aparentemente perdió la consciencia. Luego de esto, fue hallada por los trabajadores de limpieza.
Luego, un mozo saltó la puerta para destrabarla desde adentro y asistir a la menor.
La empresa que organizó la fiesta afirmó que no se encargaban de la seguridad y que ese asunto corría por cuenta del salón donde se llevó a cabo dicha celebración.
La fiscal Natalia Benvenuto de San Lorenzo imputará este jueves al presunto abusador, que ya fue identificado por la Justicia.