En una de las últimas audiencias del juicio por expropiaciones, Santiago Graffigna, principal acusado de liderar una supuesta asociación ilícita que habría defraudado al Estado mediante la manipulación de valores de terrenos, cerró su defensa solicitando la nulidad del proceso y su absolución. Graffigna, quien enfrenta cargos por estafar al Estado con terrenos tasados a precios inflados, argumentó que el proceso judicial había estado viciado de irregularidades, centrándose principalmente en cuestionar la imparcialidad de las actuaciones.
El abogado defensor de Graffigna, Marcelo Fernández, acusó al actuario Alejandro Marinelli de mantener una amistad con Rubén Pontoriero, el abogado querellante, lo que, según Fernández, favoreció a la parte acusadora durante la investigación. Señaló que esta relación debía haber motivado la inhibición de Marinelli, citando como precedente la excusación de otro secretario judicial por enemistad con Horacio Alday, uno de los imputados en el caso.
Fernández también denunció que las defensas no fueron notificadas de las designaciones de los peritos ni de las declaraciones testimoniales, lo que permitió que Pontoriero estuviera presente en esos momentos cruciales. Sostuvo que esta omisión contraviene el Código Procesal, que establece que las partes deben ser notificadas bajo pena de nulidad. Además, señaló que se habían violado los principios de imparcialidad y igualdad de armas, negando la existencia de delito o asociación ilícita.
Al final de su intervención, Fernández citó al fiscal federal Diego Luciani, instando a los presentes: «Es corrupción o justicia, en ustedes está la decisión». Tras este alegato, Horacio Alday, acusado como partícipe necesario, también presentó su defensa, que sorprendió por un cambio en la representación legal. El hijo de Alday, Natalio José Alday Bonanno, asumió el rol de defensor y, de manera informal, con cartulinas y escritura manual, adelantó que pedirá la nulidad de la acusación contra su padre, argumentando que no existía delito alguno.
El juicio, que se lleva a cabo en el Concejo Deliberante de la Municipalidad de Capital, continuará en las próximas semanas con la finalización de los alegatos y las decisiones sobre las nulidades planteadas.
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