Acuerdo Mercosur-UE: Emmanuel Macron afirma que aún no es «aceptable» y pide más cambios

El presidente de Francia se resiste a acompañar el nuevo pacto entre los bloques comerciales, pese a los avances en las negociaciones. Lula da Silva especulaba con poder firmar el tratado en la cumbre del G20.

El presidente de Francia, Emmanuel Macron, puso reparos al acuerdo entre el Mercosur y la Unión Europea, en medio de las avanzadas negociaciones entre los integrantes de los bloques comerciales. Según dijo, el pacto no es «aceptable» en las condiciones actuales. El mes que viene se llevará adelante la cumbre del G20 en Brasil, donde se especulaba que podría firmarse el entendimiento.

«En su estado actual, no es un tratado aceptable. Pedimos el respeto a los Acuerdos de París [sobre clima] (…), y protección de los intereses de las industrias y los agricultores europeos», dijo el jefe de estado francés al fin de una cumbre de la UE.

A principios de septiembre, el grupo de negociadores de ambos bloques mantuvieron un encuentro que culminó con “un progreso significativo” en las conversaciones. Según una fuente del gobierno de Brasil, la reunión contó con buena sintonía en temas clave como “áreas de medio ambiente y compras gubernamentales.

La charla se dio luego de que once gobiernos de la UE exigieran una rápida conclusión del acuerdo comercial que lleva 25 años de diálogo, en el marco de una carta a la reelecta presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.La misiva fue rubricada por los primeros ministros de Alemania, España, Portugal, Suecia, Dinamarca, Finlandia, Croacia, Estonia, Letonia, Luxemburgo y la República Checa.

El reclamo del campo francés, principal escollo en el acuerdo del Mercosur y la Unión Europea

Pese al principio de entendimiento entre los principales países de la UE y el Mercosur, Francia teme que la competencia de productos agrícolas sudamericanos pueda comprometer al sector local. Macron enfrenta fuertes presiones de agricultores franceses para que se oponga al tratado comercial. El principal sindicato de las entidades del campo dijo que «no se debe sacrificar la agricultura europea para alcanzar acuerdos comerciales internacionales”. Y pidió protección.

Desde el anuncio del primer entendimiento entre los bloques, firmado en junio del 2019, Macron lleva adelante una fuerte oposición a la firma «tal como está». El presidente francés insiste en que se tenga en cuenta su impacto ambiental y la «competencia desleal» que sufrirán los agricultores de su país.

Del otro lado, el presidente de Brasil,Luiz Inácio Lula da Silva, afirmó en agosto de este año que el Mercosur “está listo” para firmar el acuerdo. «Que la UE se entienda con Francia, pero en el Mercosur estamos listos y estamos dispuestos a firmar. Todo depende de ellos”, sostuvo durante un foro celebrado en la Confederación Nacional de la Industria(CNI).

Pese a la resistencia de Francia, Lula presiona para firmar el acuerdo Mercosur-UE durante la cumbre del G20

El mandatario brasileño especulaba con poder concretar la firma del acuerdo durante la cumbre del G20 que tendrá lugar en Río de Janeiro el próximo mes. Hace dos semanas, declaró en Nueva York que «nunca» fue tan «optimista» sobre el tratado y dijo que existía la posibilidad de rubricarlo en el encuentro que se realizará el 18 y 19 de noviembre, bajo la presidencia de Brasil. Sin embargo, tal parece que la oposición de Macron dilatará aún más el entendimiento.

Según pudo confirmar Ámbito, el presidente Javier Milei estará presente en el encuentro de líderes. El mandatario argentino fue invitado por Lula, el anfitrión de la cumbre global. La confirmación de Milei se retrasó por las diferencias ideológicas entre ambos jefes de Estado. Sin embargo, el libertario habría anunciado su viaje a través de la diplomacia argentina. El país aguarda con ansias la concreción del tratado.

Las negociaciones entre ambos bloques, que comenzaron hace casi 25 años y llegaron a un principio de consenso en 2019, volvieron a trabarse desde el año pasado por las nuevas demandas europeas en el apartado medioambiental, especialmente Francia, altamente presionado por su sector agrícola.

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