Lospenato directamente acusó al oficialismo de tener un pacto con el kirchnerismo para canjear el rechazo de ficha limpia por la reelección de Martin Menem al frente de la Cámara en la sesión preparatoria de este miércoles. La tensión escalo a tal punto que Javier Milei llamó por teléfono a Lospenato para prometerle un nuevo proyecto de ficha limpia pero redactado por la Casa Rosada. Pero a ese expediente se suma la desconfianza por el decreto de Milei que limitó el acceso a la ley de información publica sancionada durante la presidencia de Mauricio Macri así como la iniciativa del Poder Ejecutivo Nacional para eliminar las PASO, también resistida por el PRO.

Aliados de La Libertad Avanza

Sin llamado a sesiones extraordinarias por el momento, con las sesiones ordinarias ya finalizadas, La Libertad Avanza atraviesa un frágil marco de alianzas en el Congreso. Es que la Casa Rosada se retiró de las mesa de negociaciones con los gobernadores dialoguistas por el Presupuesto 2025 y no cumplió con los reclamos de las provincias relacionados a os fondos que les corresponden por ley de la coparticipación, así como las deudas de las cajas jubilatorias no transferidas, entre otros ítems.

La crisis impactó también en el Senado donde el jefe de la bancada de UP, José Mayans, mencionó la posibilidad de desplazar a Bartolomé Abdala de la presidencia provisional cuando se realice la sesión preparatoria en febrero del próximo año. A las crisis con los gobernadores, que en Diputados hicieron avanzar todas las iniciativas de LLA, desde la ye bases, hasta los vetos a las universidades y los jubilados, se suma ahora a un clima de desconfianza cruzada con el PRO de Macri.

«Esta semana, el Congreso de la Nación dejó pasar una oportunidad histórica para impedir que los corruptos condenados por la Justicia lleguen al Congreso y se garanticen impunidad con los fueros», inicia la publicación de la bancada liderada por Cristian Ritondo, que agrega: «Mientras los Diputados del PRO cumplieron con el mandato que nos dieron nuestros votantes, el Gobierno decidió estar del otro lado».